El PSOE no descarta abstenerse en la moción de censura a Rajoy

Madrid

El líder electo del PSOE ha tomado este miércoles sus primeras decisiones. Pedro Sánchez tiene la intención de diseñar una nueva estructura en la Ejecutiva del partido en la que no habrá barones y ha nombrado al valenciano José Luis Ábalos, hombre de su máxima confianza en los últimos meses a pesar de que se abstuvo en la investidura de Mariano Rajoy, como portavoz provisional en el Congreso en sustitución de Antonio Hernando.

Defina portavoz provisional

He insistido mucho en el carácter provisional porque esto se deriva de un hecho sobrevenido, que es la renuncia de Antonio Hernando como portavoz. En estos momentos, la dirección sigue siendo la gestora aunque coincide con un secretario general ya elegido. En esta situación excepcional, en la que aún no ha concluido el proceso para el Congreso del PSOE, no hay una dirección del partido, cosa que ocurrirá el 18 de junio. Lo normal es que cuando haya una dirección política establezca las nuevas direcciones de los grupos parlamentarios tanto en el Senado como en el Congreso. Como se ha dado esta circunstancia por la renuncia de Antonio Hernando, se plantea que uno de los miembros de la actual dirección del grupo parlamentario, de los que permanecemos, además merece la confianza del nuevo secretario general. En ese caso, soy yo la persona.

Reúne usted todas las condiciones...

Reúno la presencia en el grupo parlamentario y la confianza. Por eso es una situación provisional hasta que haya una nueva dirección, que deberá hacer la propuesta y será ya sometida a consideración al propio grupo parlamentario. Se necesita un interlocutor con los otros grupos, con la propia cámara, también en cuestión interna, por eso hace falta la figura del portavoz.

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Y durante todo ese tiempo, ¿cómo se gestiona el grupo parlamentario? Hay mayoría de diputados que se manifestaron afines a Susana Díaz, minoría de Sánchez. Ayer se vivió un enfrentamiento entre dos diputados...

Son dos cosas distintas. Una es el derecho que tiene todo militante o diputado a tener una opción política cuando se abren en un proceso de primarias. Se han planteado tres candidaturas y lo normal es que cada uno, cada una, opte por la candidatura que quieran. Esto ya ha terminado. El tiempo de las opciones ya está cerrado. El grupo parlamentario, como ha hecho en otros momentos complicados, tiene una cultura muy anclada en la disciplina. Ya sé que ha habido episodios de indisciplina, pero no tan relevantes para afectar a la marcha del grupo.

¿Lo de la investidura de Rajoy no fue indisciplina por parte de un sector?

Fue muy limitada. Yo tenía la posición contraria y, sin embargo, me abstuve respetando la disciplina. Fuimos muchos más los que cumplimos y era una situación bien distinta. Los que votaron 'no', no dejaron de ser disciplinados respecto a la organización a la que pertenecían, por ejemplo, el PSC o el PSOE de Baleares. Fueron igualmente disciplinados que yo pero con otras instrucciones. Hemos tenido algún otro episodio territorial con planes de agua o con la reforma laboral. Siempre ha habido algún episodio, pero aislado, sin afectar al conjunto del grupo. Yo, por lo que he detectado con este nombramiento provisional, es muy buena disposición. Mi relación con todos los compañeros y compañeras es excelente en el plano de lo personal y todos se han ofrecido a colaborar.

¿Y el enfrentamiento entre Margarita Robles y Antonio Trevín?

Eso fue un tema muy puntual que yo creo que también es porque los resultados del domingo están ahí muy presentes. Y efectivamente hay que tener una actitud para evitar esa suspicacia, esa hipersensibilidad. Hay que superarla y hay que dar tranquilidad. El grupo parlamentario debe entender que no hay consecuencias inmediatas por haber tomado una decisión u otra. En la medida en las responsabilidades se mantienen, se van a mantener. La integración y el trato es el que siempre hemos tenido. Confío en superarlo. Como digo yo, esto es un nombramiento con cese incluido.

Una de sus primeras misiones va a ser representar al PSOE en la moción de censura de Podemos contra Rajoy el 13 junio, ¿mantienen el no?

No, nosotros no hemos decidido la votación todavía. Lo que hemos definido es nuestro rechazo a la moción. El cómo la representemos está todavía por decidir. Consideramos que la iniciativa planteada tiene dos partes. Una que tiene que ver con lo censurable pero otra tiene que ver con la alternativa. Compartimos plenamente el objeto de censura pero no la alternativa.

La única manera de escenificar rechazo es no apoyarla

Pero no apoyarla se puede traducir en un voto negativo o en una abstención

¿Está todavía abierto?

Tenemos que fijar la posición

Su campaña a favor de Pedro Sánchez arrasó en Valencia con más del 63% de los votos frente el 27% a Susana Díaz, ¿se va a postular para liderar el PSOE valenciano en el próximo congreso regional?

No, no. Es una pregunta que se me hace mucho y siempre respondo lo mismo. Estoy en otras inquietudes.

Y si no es usted, ¿va a promover a otro candidato?

Yo no voy a promover a nadie, otra cuestión es que pueda haber alguien que tome la iniciativa que quiera. Para esto tiene que acreditar y sintonizar con un movimiento que haga posible eso. El posicionamiento del domingo fue claramente a favor de Pedro Sánchez y eso es lo que se preguntaba.

¿Ha quedado Ximo Puig en una posición de debilidad?

No ha quedado en una posición buena. La influencia que ha ejercido se ha cifrado en ese dato. Con todo, cada uno tiene perfecto derecho a posicionarse y esto no tiene que tener más consecuencias. Uno puede influir más o menos, tener más o menos simpatías con el cuerpo electoral, con la afiliación del partido. Me parece menos importante que el hecho de implicar a las instituciones que son en beneficio de todos y que son la conquista de esfuerzos colectivos. Deben preservarse en estas cuestiones orgánicas, que son siempre de parte. Se tenía que haber esmerado más.

Por utilizar sus palabras, si un líder no queda en una buena posición, ¿puede seguir siendo líder, como en este caso en Valencia?

Si lo deciden los socialistas valencianos, por supuesto. Si consigue el apoyo y no hay alternativas, claro que puede ser. Yo procuraría reflexionar de los errores y trataría de integrar a los afiliados en un proyecto colectivo y común. Compartir e integrar al máximo, y comprender las razones que llevaron al resultado de pasado domingo.