El PSOE acepta el envite

Barcelona

Entre bronca con Ciudadanos y bronca con el PP, Pablo Iglesias suma un nuevo éxito: el PSOE acepta el envite, se ancla en la izquierda y tiende la mano a Podemos para construir nuevas alternativas. Habrá que esperar y ver si es posible recomponer las relaciones, pero los números no engañan. Como estaba escrito, la candidatura de Pablo Iglesias a la presidencia ha sido rechazada. Pero Rajoy ha salvado el puesto sin mayoría absoluta. El sí a Iglesias y la abstención suman 179, el no, 170. Hay margen para un futuro próximo.

Dos efectos del debate. Primero: Podemos queda como referencia de los sectores sociales críticos con el PP. A Pedro Sánchez le toca espabilar. Segundo: Los matices se incorporan al conflicto catalán. España, además de una o rota, puede ser plurinacional.

Miserias nacionales. Rafael Hernando, el portavoz del PP, utilizando a la mujer (Irene Montero) para provocar al macho (Pablo Iglesias) El machismo que no cesa.

La moción de censura ha encubierto otras noticias. Por ejemplo, la anulación por el Tribunal de Estrasburgo de la sentencia que condenó por desobediencia a Atutxa cuando presidía el parlamento vasco. Otra nota de descrédito para España. Es una pena que estas rectificaciones lleguen tan tarde. Pero deberían servir de lección para los que encuentran gusto a utilizar la justicia como instrumento político.

Leo una reflexión de Tzvetan Todorov sobre la política y los políticos. “Desconfío de aquellos que nos proponen instaurar el bien, pero también de aquellos que dicen que no es posible mejorar la situación, que no hay alternativa. Mejorar es posible, lo que no es posible es alcanzar el bien, porque es un absoluto. Equivaldría a abandonar el jardín imperfecto en que vivimos”.