"El gobierno español hace lo posible para disimular o negar el hambre de España"

Madrid

Cada lunes nos acercamos al hambre. El hambre como concepto, como palabra y sobre todo como realidad. En ese viaje nos acompaña Martín Caparrós, autor de El hambre, junto a Macarena Berlín, en el segundo tramo de Hoy por hoy.

El origen de su libro responde a la vivencia que tuvo en un pueblo de Níger, cuando trabajaba para el Fondo de Población de las Naciones Unidas. Allí empezó a conversar con una señora, frente a una choza. Le preguntó qué comía: "Una bola de mijo", le respondió, haciendo referencia al cereal que crece en sus tierras. Lo acompañan con agua, leche, alguna hierba y forman con ello una bola.

Aquella mujer, que comía cuando podía, si tuviera que pedir algo a un mago, elegiría tener una vaca para poder tener leche o hacer buñuelos. Caparrós le volvió a formular la pregunta, pensando que le contestaría de forma diferente y su respuesta tímida fue "tener dos vacas". "La pobreza extrema no solo te priva de comida y posibilidades, sino sobre todo de horizontes", comentaba Caparrós a raíz de esta historia.

En España también hay hambre. No como en África, India o algunos puntos de América Latina, dice Caparrós, pero "hay situaciones de desnutrición o malnutrición" a las que decidimos no mirar. "El gobierno español hace lo posible para disimular o negar el hambre de España", denunciaba.

Desde Cáritas, informan de que hay pocos datos relativos a esta realidad. "Durante la crisis llegó a haber 350.000 familias que pudieron someterse a una experiencia de hambre", comentaba Guillermo Fernández Maillo, técnico del equipo de estudio de Cáritas.