¿Qué pasaría si los gatos desaparecieran del mundo?

Madrid

Hoy... Japón. Allí, los gatos tienen dos caras: La de la suerte y la del demonio. Son animales de compañía relajados para seres urbanos que viven frenéticos. Pueden ser oriente y a la vez occidente. Doraemon (el gato cósmico) y la gatita de Hello Kitty. Dioses o demonios que tienen una isla en Aoshima y el 22 de febrero celebran el día nacional de este felino. ¿Qué pasaría si desaparecieran los gatos? Espido Freire, escritora, amiga de esta casa, libre pensadora y amante de los gatos vuelve a aportar su reflexión a lo largo de este verano a Macarena Berlín en Hoy por Hoy para hablar de la literatura adaptada a las circunstancias.

Espido Freire analiza el libro Si los gatos desaparecieran del mundo, de Genki Kawamura, donde "un joven cartero regresa a su casa después de que el médico le diagnosticara una enfermedad fatal. Allí se encuentra a su gato Col y a un extraño personaje, idéntico a él excepto en su actitud y en su vistosa indumentaria (camisa hawaiana), que dice ser el diablo" y que, a su vez, le anuncia su muerte inminente. "Pero le ofrece un trato: por cada objeto animado o inanimado que acepte que desaparezca del mundo, ganará un día de vida". Empieza por los teléfonos, sigue el cine, luego los relojes... Pero cada uno le evoca aspectos de su vida, la relación con su exnovia, con su padre cuya relación terminó mal... De alguna manera, los gatos enseñan que para conseguir algo siempre hay que renunciar a otra cosa.

Por otra parte está la personificación de los gatos, "por la que desde niños asumimos que un animal nos representa, ama... la cultura japonesa es particularmente flexible al respecto. Por ejemplo, dirige anuncios a adultos con protagonistas animales (en occidente eso es para niños)", advertía la escritora, quien vive con cuatro gatas: Lady Macbeth, Ofelia, Rusia, e Iona. De hecho, Espido mostró en su cuenta de Instagram una fotografía de Lady Macbeth metida en su bolso. "Como nos gustaría hacer a todos: esconder, desaparecernos... Sentir que no estamos ahí".

'Si los gatos desaparecieran del mundo' es una novela, según Espido Freire, "que pone en valor nuestra existencia cotidiana y lo que nos rodea, al mismo tiempo que critica a una desnortada sociedad en la que prima el individualismo y lo superfluo sobre lo esencial de la vida". A fin de cuentas, ¿los gatos están a años luz de los humanos en cuanto a inteligencia emocional?