El incierto futuro de Hazam Yalçin, el periodista turco encarcelado en España

Madrid

Hamza Yalçin es uno de los 13.000 mil escritores que integran el Club Pen. En la delegación española, su presidente Basilio Rodríguez Cañada, insiste en que el periodista turco de pasaporte sueco "no es un sujeto que se haya distinguido por posiciones radicales". Parten de esa base para confiar en que "se pueda documentar con elementos de juicio cuál ha sido su participación en los actos de los que se le acusa, porque si es solo por publicar su opinión, es su derecho a la libre expresión".

Ramón Lobo, de Reporteros sin Fronteras, asegura que no podemos entrar en el juego de que cualquier país que no crea en las libertades mínimas de expresión pueda acusar a una persona de insultarle y exigir su detención

Más allá de la presión de organizaciones y profesionales, el futuro de este periodista turco con pasaporte sueco está en manos de la Audiencia Nacional. José Antonio Martín Pallín, magistrado emérito del Tribunal Supremo empieza su análisis con un matiz frente a quienes critican de entrada la detención: "El protocolo de Interpol es demasiado automático, en el sentido que Interpol no matiza. Está bien que la Policía no haga juicios políticos". Por tanto, no había margen en el momento de aplicar la orden de Interpol, pero sí en las horas posteriores: "En este caso yo hubiera llamado a la embajada y al consulado sueco. Si ellos responden por él, yo lo dejo en libertad hasta que se tramite el expediente".

Turquía firmó el Convenio Europeo de Extradición, pero eso no implica que el periodista tenga que ser entregado a ese país. Martín Pallín recuerda que el tribunal podría acogerse al artículo 3 del Convenio que permitiría aclarar que este periodista no ha cometido un delito de terrorismo, sino que ha expresado libremente su opinión. Turquía tiene 40 días para presentar el expediente de acusación y formalizar su petición de extradición.