Las fiestas populares, el escudo para el maltrato animal
Recorremos algunos puntos de España en los que la tradición alberga la violencia contra los animales
Madrid
El 15 de agosto se celebra La Asunción de la Virgen en todo el territorio español. Con esta fecha arrancan muchas fiestas en las que hay episodios de maltrato animal que se escudan en la tradición, en la cultura. En Hoy por hoy con Macarena Berlín ponemos el foco en algunos puntos donde tienen lugar estas celebraciones acompañados con el testimonio de Miguel Ángel Rolland, autor del documental Santa Fiesta, que recoge el maltrato de algunas tradiciones populares.
Miguel Ángel Rolland: 'Esas fiestas permiten una coartada para sacar lo peor de nosotros mismos
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Miramos hacia Amposta, Tarragona donde tiene lugar el 'toro embolao', una tradición donde se golpea al toro, se le tira del rabo y se le veja. "Es uno de los sitios más difíciles de los que estuvimos", relataba Rolland, ya que tuvieron que ser precabidos a la hora de grabar. En algunos rincones de España donde las tradiciones taurinas son el centro de las fiestas, dice "empiezan a ocultar y desmarcar los actos taurinos de las fiestas", porque no aparecen en el programa oficial de las fiestas. Ellos tienen otro programa específico para los actos taurinos. "Son más de 35 actos", manifestaba, que chocan con la poca presencia de actos musicales o infantiles. "Solo hay 7 actos infantiles", informaba.
La ciudadanía comienza a penalizar y mirar hacia estas tradiciones que esconden la violencia contra los animales. Cuando rodaron el documental, dice, encontraron oposición cuando intentaban fotografiar o grabar. "Cuando uno está orgulloso de una tradición, permite que se vea", sostiene.
Además, se hace partícipes a los más jóvenes de esta violencia, aunque esté prohibida la presencia de menores. "Esas fiestas permiten una coartada para sacar lo peor de nosotros mismos e invitar a los más jóvenes a participar de esa excusa", comentaba.
El código penal, dice, ha dejado vacíos por donde se escapan algunas tradiciones. En otros casos, es ilegal, aunque se siguen practicando. "El uso recreativo de los animales está contestado por los países de nuestro entorno y cada vez más por nuestra ciudadanía", explicaba.