Monumento
Cada semana el filósofo Javier Gomá reflexiona con los oyentes a través de la definición de un concepto
Madrid
Las vidas humanas merecerían durar más allá del breve tiempo que les es concedido y por eso muchas de ellas se esfuerzan por elevar, con los materiales de este mundo, un monumento, esto es, una obra pública y patente que, gracias a su consistencia, burla ese mezquino plazo.
'Monumento' la última palabra de la semana, por Javier Gomá
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Uno querría darle a su vida una perduración semejante, por ejemplo a la de las pirámides egipcias, que siguen conmemorando el nombre del faraón en cuyo honor se levantaron siglos, milenios después de su muerte. Una pirámide, en su sobria perfección, simboliza la perpetua primavera de una realidad constante, emancipada de los vaivenes de una mudable actualidad.
La experiencia enseña que cualquier empresa que uno intente en este mundo, cuando verdaderamente vale la pena, cuesta mucho trabajo y cansa. Vivir es el arte de elegir la forma de nuestro cansancio futuro. Unos se consumirán en los afanes de una actualidad transeúnte, espuma de los días, mientras que otros preferirán comprometerse a largo plazo con la realidad durable y poner su cansancio al servicio de una pirámide en construcción.
No es monumento todo lo que dura. También duran mucho una piedra o un esqueleto y no por ello hay que atribuirles un carácter monumental. Lo decisivo no es tanto si el objeto perdura como si es digno de perdurar, si merece esa permanencia en la estimación de sus semejantes, aunque en ocasiones, por algún accidente, quizá pueda no producirse.
Y lo que en este mundo verdaderamente merece perdurar es la perfección, lo juzgado mejor en cada género y más perfecto.
Las dos modalidades de monumento que nos es dado levantar aquí, sobre nuestro suelo, son la peculiar perfección moral que puede uno prestar a su propia vida y la belleza perfecta del arte. La vida y la obra bien hechas. La ejemplaridad póstuma, custodiada en el recuerdo de quienes sobreviven, y la obra artística eterna. No hay más.