Triste y avergonzado
Y le añadiría que asustado, sí, lo reconozco: bastante asustado. Porque ni yo ni nadie, insisto: nadie sabe cómo puede terminar todo esto
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Madrid
¡Vaya día llevamos, vaya día! Les supongo al corriente de todo el follón en que estamos metidos, y como la radio admite muy pocas trampas no les voy a ocultar que mi estado de ánimo está hoy bastante tocado.
La opinión de Francino (06/09/2017) - Triste y avergonzado
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Yo soy periodista, mi trabajo es contarles historias –y hoy lo voy a seguir haciendo, por descontado– pero tampoco quiero ocultarles cómo me siento porque creo que no estamos en un día cualquiera.
Hace tres años, con motivo de l’onze de setembre, de la Diada nacional de Catalunya, abrí esta ventana con un comentario, con una opinión muy personal, muy mía, que llevaba por título “harto y cabreado”. Era mía pero sé y me consta que no era el único catalán que se sentía así. Si hoy tuviera que buscar un título a cómo me siento, seguramente sería: “avergonzado y triste”. Y le añadiría que asustado, sí, lo reconozco: bastante asustado. Porque ni yo ni nadie, insisto: nadie sabe cómo puede terminar todo esto.
Estoy avergonzado por el espectáculo de hoy en el parlament, por el atropello, la cacicada de la mayoría independentista que no puede justificarse de ninguna manera en el “es que no nos hacen caso”. No, la política es picar piedra, y picar, y picar, pero no saltarse la ley y el propio reglamento de la cámara a la brava. Ningún proyecto político democrático puede tener una base así. Eso en mi opinión ha sido una vergüenza, sin paliativos, es inaceptable. El acento de hoy hay que ponerlo ahí, sin ninguna duda. Dicho lo cual, tampoco deberíamos olvidar la lista de pirómanos que han contribuido a que este fuego sea tan grande.
Y eso es lo que me lleva a sentirme también triste, muy triste. Y asustado. Porque la política ha fracasado, esto es un fracaso enorme; y la política, tan denostada, tan criticada, es lo único que nos libra de la selva.
Sólo quería compartir esto con ustedes. Enseguida vamos con la información.