Ya nos hemos hecho daño

Madrid

En Catalunya hay una expresión que dice "prendrem mal", que traducida es, más o menos, nos vamos a hacer daño.

Intuímos que "prendríem mal" el día en el que el PP decidió poner mesas petitorias para recurrir el Estatut de Catalunya, el día que presentó el recurso y el día que el Constitucional tumbó el Estatuto.

Intuímos que "prendríem mal" el día en el que Artur Mas se apropió de la bandera de los ciudadanos y se convirtió en el más independentista de todos, enterrando con la bandera la corrupción, los recortes y su gestión.

Intuímos que "prendríem mal" el día que Mariano Rajoy calificó de lío y algarabía la primera de las seis manifestaciones multitudinarias del 11 de septiembre.

Intuímos que "prendríem mal" el día que ya dimos por hecho que Rajoy no haría nada ni por evitar la ruptura, ni para seducir a los catalanes.

Intuímos que "prendríem mal" el día en el que el govern de la Generelaitat apretó el acelerador, convocó un referéndum unilateral y decidió no respetar ni las leyes españolas, ni las catalanas.

Intuímos que "prendríem mal" cuando ante todo esto la única vía que tomó el gobierno central fue la de la judicialización.

Hoy la Guardia Civil ha entrado en consejerías y otros organismos catalanes, ha detenido a responsables políticos. Miles de catalanes están a esta hora en la calle. El gobierno central dice que ha asestado un golpe mortal al referéndum. El gobierno catalán dice que el referéndum se va a celebrar.

Ja hem pres mal. Ya nos hemos hecho daño.