Las primeras al volante

Madrid

Anda la gente muy sorprendida esta semana (y no es para menos) al saber que Arabia Saudí va a permitir conducir a las mujeres. Sin embargo, hace ya tiempo que algunas de ellas se pusieron al volante y crearon el movimiento #Women2Drive.

Arabia Saudí es uno de los países más represores del mundo con la mujer y la decisión de permitirlas conducir también se interpreta como un intento de mejorar su imagen exterior… el de la de la Opinión Pública occidental que censura de forma considerable los negocios de sus gobiernos con Ryad.

El movimiento #Women2Drive lleva años reivindicando esa libertad para la mujer… esa y el resto. Lo han hecho tomando el volante y distribuyendo vídeos en Internet A algunas les ha costado una temporada en prisión. La escritora y activista saudí Hala al Dosari es una de esas mujeres. Hemos dado con ella en Washington.

¿Por qué prohibían conducir a las mujeres?

Arabia Saudí tiene un lobby religioso muy poderoso. Siempre ha sido uno de los pilares sobre los que se ha apoyado el rey desde que se fundó el país. Es por eso que los asuntos de la mujer siempre han dependido mucho de ese lobby y el empeño del rey por defender en Arabia Saudí la versión más estricta del Islam. El apoyo de esos clérigos religiosos es para el rey mucho más importante que el apoyo que puede tener de las mujeres para poder conducir. La participación de la mujer en la economía del país nunca ha sido un asunto de peso en Arabia. Yo creo que ahora la cosa ha cambiado y hay más apoyo para que la mujer forme parte de la vida pública para compensar las restricciones, las reformas y los recortes que se están llevando a cabo en la economía.

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 ¿Por qué ha elegido Arabia Saudí este momento para anunciar la medida?

En realidad esto no ha pasado cuando las mujeres y las activistas comenzaron a pedirlo hace años... Yo creo que esto ha ocurrido por una cuestión de imagen pública. Arabia Saudí y su rey tienen problemas con la imagen exterior que refleja la prensa y en la comunidad internacional. Esto ha ocurrido sobre todo después de una investigación independiente sobre la participación del país en Yemen... Yo creo que el nuevo rey ha encontrado un buen momento para revitalizar la imagen del país y contrarrestar las opiniones que presentan a Arabia como un país agresivo que se mete en las guerras de Oriente Medio. Yo creo que todo lo que está pasando allí responde a ese compromiso. Los oyentes deben tener en cuenta que se están llevando a cabo más reformas para cambiar esa imagen, aparte del tema de las licencias de conducir.

¿Cuál ha sido el papel del movimiento #Women2Drive para conseguir el fin de esta prohibición?

Creo que el movimiento #Women2Drive ha generado una presencia internacional de este tema... un interés por conocer la situación de las mujeres. Ha conseguido que se sepa que hay un país que prohíbe conducir a la mujer. Que se sepa que Arabia Saudí era el último país del mundo que prohibía conducir a las mujeres. Eso ha permitido que el mundo sepa la trágica situación de mujeres que están obligadas a ir cubiertas totalmente por un traje... o que no se les permite organizarse ni sumarse individualmente a un movimiento como este. Para la comunidad internacional ha resultado impactante ver a mujeres en esas circunstancias tener que jugársela cada vez que querían conducir un coche a pesar de la prohibición que pesaba sobre ellas para hacerlo. Y eso ha despertado el interés de los medios por conocer la situación de las mujeres en el país. A su vez, eso ha permitido meter este asunto en la agenda política mundial y facilitar que el rey haya tomado su decisión.

Algunas de esas mujeres han sido encarceladas por sumarse a esta iniciativa...

 Así es... hemos tenido a dos mujeres que fueron encarceladas durante meses por hacerlo, una de ellas estuvo nueve meses en prisión. Pero también tenemos muchas mujeres que han perdido sus coches porque se los han confiscado, otras mujeres que han sido detenidas e interrogadas por hacerlo... De hecho, hay mujeres a las que se les ha prohibido comentar esta decisión de Arabia Saudí en la prensa internacional después del anuncio en un intento de controlar la información que han publicado los medios sobre este asunto. Lo que ocurre es que estas mujeres no sólo reclamaban el fin de la prohibición para conducir... quieren el fin del sistema de tutela de los hombres sobre las mujeres que hace que ellas están permanentemente controladas en todo lo que hacen. Las mismas mujeres que han pedido el fin de la prohibición de conducir reclaman también el fin de otras restricciones que todavía siguen vigentes. Lo que sí creo es que la decisión empodera a esas mujeres. Considero que para ellas supone un reconocimiento a un esfuerzo de años.

¿Sigue vigente el "guardianship system"?

Es un sistema reconcido por la ley, basado parcialmente en la tradición. Las costumbres exigen a las mujeres presentar la autorización de sus Guardianes si quieren acceder a ciertos servicios. Este sistema ha sido bastante respetado por algunos grupos sociales y por algunas mujeres, sobre todo en asuntos relacionados con la educación, viajes, derechos médicos y reproductivos. Hemos visto un movimiento creciente en Arabia Saudí, sobre todo a muchas mujeres jóvenes y activistas, que han luchado por abolir el sistema desde 2016.

¿Cree que se levantarán pronto otras restricciones?

Creo que el gobierno saudí se ha dado cuenta de que fomentar el empoderamiento de las mujeres es bien recibidio por la comunidad internacional. El gobierno necesita atraer a inversiones internacionales, necesita el apoyo del extranjero, y sabe que una forma de conseguirlo es permitir derechos a las mujeres. Por eso creo que esta va a ser una tendencia en aumento en los próximos años.

Los abortos clandestinos matan a 47.000 mujeres

Esta semana, aprovechando el Día Internacional por la Despenalización del Aborto, analizamos cuáles son los países más restrictivos y los que más castigan a las mujeres. La mayoría están en América Latina y en el Caribe. Con la ayuda de Alianza por la Solidaridad trazamos el mapa de los países que más persiguen a las mujeres que necesitan interrumpir su embarazo. Cada año, mueren 47.000 mujeres por culpa de los abortos clandestinos. Estaremos en Perú, uno de los países que más penalizan los abortos. Escúchalo aquí: