Isco ya no es un revulsivo

Hoy hay jornada de Champions. Juega el Sevilla contra el Spartak en Moscú y el Madrid en el Bernabéu contra el Tottenham. Mañana será turno de Barça y Atlético de Madrid.

Y mientras Bale sigue lesionado, Isco sigue aprovechando cada minuto, cada partido y cada oportunidad que le da Zidane para demostrar que hoy por hoy es el mejor jugador del Real Madrid, el futbolista más en forma del equipo blanco y probablemente el mejor centrocampista que hay ahora mismo en Europa.

Esto va por rachas, pero la de Isco ya dura y ha pasado de ser ese jugador revulsivo que hacía una filigrana y que volvía loca a la grada en los 20 minutos que le daba Zidane, o los entrenadores que le tuvieron antes, a ser un jugador indiscutible.

No es un revulsivo, sino un titular por derecho propio y juega los 90 minutos sumando a esa genialidad y a esa clase y a esas jugadas que levantan a la grada una solidez, un trabajo defensivo y una regularidad, que nunca antes había mostrado en su carrera.

Parece que ha terminado con todos los debates, incluso con el de Bale, pero algunos dudamos de si cuando vuelvan a estar los tres, Benzema, Cristiano y Gareth Bale, Isco seguirá siendo tan titularísimo como lo es hoy en el Bernabéu frente al Tottenham de Pochettino.