Hay derecha para rato

Barcelona

El presidente Montilla, varios medios de comunicación, organizaciones empresariales, dirigentes políticos y sociales diversos, presionan contrarreloj a Puigdemont para que convoque elecciones. Preocupa el artículo 155 porque se avista un escenario sórdido, tanto en lo político como en lo económico. Las líneas de confrontación se moverán, en la medida en que el soberanismo encontrará en los comunes e incluso en algunos sectores del PSC, aliados para un frente común de resistencia. El mundo económico se teme un estado de pesimismo y tensión nada favorable a sus intereses.

Si Puigdemont convoca elecciones dentro del marco constitucional, no hay razón para aplicar el artículo 155. Así se ha pronunciado tanto el PSOE, a través de Margarita Robles, como el PSC, por medio de Núria Marín, distanciándose del PP que exige más. El PSC se juega un montón de ayuntamientos en los que gobierna en coalición, porque sus socios le echarán o le abandonarán si el procedimiento avanza. Y el PSOE necesita gesticular para no diluirse definitivamente en el trío con PP y Ciudadanos.

Con la activación del artículo 155, el PP, además de asentar su programa de recentralización, que viene aplicando con contumacia desde los tiempos de Aznar, se garantiza un panorama a medio plazo de hegemonía política, sin posibilidad de alternativa de gobierno que le eche del poder. ¿Con quién puede aspirar el PSOE a formar mayoría para desplazar al PP después de haber pactado el 155 con el Gobierno? ¿Dónde están sus potenciales aliados? Hay derecha para rato.

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