"Trump es un gran mentiroso"

Madrid

Sin haber cumplido un año en la Casa Blanca el presidente norteamericano, Donald Trump, solo cuenta con el 36,9% del apoyo ciudadano. Los datos demuestran que el magnate ha quemado en este tiempo el beneficio de la duda que los estadounidenses suelen conceder a sus presidentes en los meses posteriores a su toma de posesión convirtiéndose en el más impopular de sus nueve predecesores. Poco va a poder celebrar el mandatario en su primer aniversario como presidente.

Una de sus principales aficiones es la mentira. Trump dice de media diaria cinco afirmaciones falsas según un estudio del diario The Washington Post publicado recientemente. En 298 días como presidente el multimillonario ha dicho 1.628 mentiras. La temática varía proporcionándole un amplio repertorio que condimenta con feroces ataques a sus rivales y mucha exageración. Entre todos esos ataques están los dirigidos a los periodistas que critican su gestión, su egocentrismo le hace menospreciar sin piedad a los medios que le resultan incómodos. Sus amenazas, siempre a través de Twitter, contra las cadenas CNN, NBC, CBS o los diarios The Washington Post y The New York Times, se han convertido en algo compulsivo y carente de toda lógica.

Esto es algo que sabe muy bien el periodista y presentador de Univision, Jorge Ramos. Ramos (Ciudad de México, 1958) es considerado por la revista Time uno de los 25 hispanos más influyentes en Estados Unidos. Presenta el Informativo de dicha cadena desde 1986 y escribe una columna semanal para más de 40 periódicos en toda América. Ha ganado ocho premios Emmy y es autor de diez libros, el más reciente: “Sin miedo. Lecciones de rebeldes” (“Take a Stand. Lessons from rebels”), una recopilación de entrevistas realizadas a lo largo de su carrera profesional.

Las imágenes del periodista expulsado de una rueda de prensa en Dubuque (Iowa) durante la campaña electoral de Trump, en 2015, dieron la vuelta al mundo. Ramos estaba tratando de hacer una pregunta sobre inmigración, sin micrófono, cuando Donald Trump hizo un gesto a uno de sus agentes de seguridad para echarle. El periodista aguantó estoicamente los empujones del agente de seguridad hasta que le sacó de la sala ante la mirada atónita de sus colegas. "Siéntese. No le he dado la palabra", le dijo Trump unos minutos antes tratando de callarle por ser uno de sus mayores críticos en cuestiones de inmigración. "Vuélvase a Univisión", remató con su habitual tono despectivo.

Charlar con Jorge Ramos es dibujar la historia más reciente de Estados Unidos además de realizar un ejercicio de madurez periodística y de libertad. Su pasión por el periodismo le permite hablar sin tapujos: “Los periodistas tenemos que dar voz a las minorías. La única manera de hacer buen periodismo es siendo enemigo de una causa.” Ramos es un veterano al que le duele ver el teatro miserable y barato que representa Trump, el acoso al que se ven sometidos muchos compañeros de profesión y la marginación que sufren millones de latinos que viven en Estados Unidos. Y lo denuncia sin pudor.

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