Imprescindibles ONG
Pero a mí sinceramente me choca, me chirría y también me cabrea que quiera aprovecharse este episodio para cuestionar la ayuda humanitaria
Madrid
El cinismo y la hipocresía son dos cosas que a mí personalmente me ponen de los nervios, pero por desgracia son muy visibles. Les digo esto a cuento de las voces que se han alzado en la unión europea, pero sobre todo en Gran Bretaña, sugiriendo un posible recorte de la ayuda económica a las ONG.
Imprescindibles ONG
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Estos días, como ya sabrán, ha estallado un gran escándalo que afecta a Intermón-Oxfam al saberse que algunos de sus trabajadores utilizaron parte de ese dinero para montar orgías y prostituir mujeres; y que eso habría ocurrido en Haití, tras el terrible terremoto de hace ocho años donde murieron más de 300.000 personas. Vamos a ver, la historia es repugnante, la negligencia –o el ocultamiento– de algunos responsables de esa ONG parece que es palmaria; y por lo tanto deben exigirse responsabilidades al máximo. Pero a mí sinceramente me choca, me chirría y también me cabrea que quiera aprovecharse este episodio para cuestionar la ayuda humanitaria.
Los abusos sexuales, los abusos de poder en definitiva, forman parte –por desgracia– de la condición humana. Y se dan en el mundo del cine, de la política, de la educación, del periodismo y también de las ONG. Pero no se puede lanzar un torpedo como ese a su línea de flotación –recortarles las ayudas– porque sería tanto como dejar desamparadas a miles de personas en todo el mundo que ya viven bajo mínimos; y además sería enormemente injusto.
No sé, igual es manía mía, pero creo que a este colectivo de las ONG, que incluye en su ADN una parte de denuncia, de conciencia, de mosca cojonera… Hay gente, y gente poderosa, que le estaba esperando. Y ahora creen tener un asidero al que agarrarse para ponerles en cuestión. Yo creo que ese un comportamiento hipócrita y cínico. Y creo también que la respuesta más potente debería ser la transparencia y el compromiso de un mejor control. Porque, claro, ¿qué sería de este mundo –que ya está bastante jodido– sin el trabajo de las ONG? Casi que prefiero no saberlo.