8M: las mujeres paran para que la Igualdad no se pare
Contra los que dicen que el feminismo y las reivindicaciones victimizan a las mujeres, la realidad es que el movimiento feminista es la historia de un éxito que ha hecho al mundo mejor
undefined
Madrid
El Foro Económico Mundial decía en su último informe que al ritmo que llevan las políticas de igualdad, la igualdad entre hombres y mujeres, no será real y total hasta dentro de cien años. Cien años. Si somos iguales en derechos, ¿por qué tenemos que esperar un siglo?
Más información
Esta es la pregunta que parecen haberse hecho a la vez millones de mujeres en el mundo entero dándole un acelerón a la Historia que no sabemos, ojalá, si acortará ese tiempo tan largo que nos ponen por delante para algo tan natural, tan elemental, como aspirar no sólo a tener derechos sino a ejercerlos en condiciones de igualdad.
Mañana es 8 de Marzo, hay convocada una huelga feminista, una movilización que es mucho más que un paro laboral. Se trata de subrayar por ausencia el lugar que las mujeres ocupamos en el mundo, en el trabajo y en casa, en los mercados y en los lugares donde se cuida a los que no pueden cuidarse.
Es una gran novedad y ha provocado mucho desconcierto, muchos debates, que ya son un éxito en sí mismos, mucha reacción defensiva pero también una movilización arrolladora a la que se han sumado mujeres de todos los ámbitos, en toda España y en todo el mundo.
Hay muchas mujeres que no podrán hacer huelga, es evidente, por ellas la hacen también las que sí pueden. Eso debe ser lo que algunos han tachado de elitista.
Otros han pretendido descalificar esta huelga, que no va contra nadie en concreto y mucho menos contra los hombres, diciendo que es una movilización política. Naturalmente que es política. Política es que la rueda del mundo gire porque una parte muy importante del trabajo necesario para atender a mayores, niños y enfermos haya descansado y descanse sin remunerar sobre mujeres que acaban viendo truncadas o detenidas sus carreras y convertidas después en pensionistas más pobres. O en mujeres que lo hacen mal pagadas y sin asegurar su futuro. Política son las medidas necesarias para revertir esa situación. Política, las cuotas en los partidos y las empresas y las reglas para evitar la brecha salarial. Política, el Código Penal que castiga la violencia sexual y el acoso. Política, que en la escuela se eduque en igualdad.
Contra los que dicen que el feminismo y las reivindicaciones victimizan a las mujeres, la realidad es que el movimiento feminista es la historia de un éxito que ha hecho al mundo mejor. Hoy el mundo es mejor que hace un siglo cuando no podíamos ni votar, mejor que hace tres siglos cuando se nos negaba la educación y la ciudadanía y mejor que hace sólo 60 años cuando el único horizonte que ponían por delante de la mayoría era un matrimonio que las anulaba. La organización social, la economía, la convivencia ha mejorado, gracias a las batallas ganadas por el feminismo, que siempre tuvo que avanzar rodeado de mucha incomprensión inicial.
Mucho antes de cien años sabremos en qué mejora la marcha de la humanidad este tsunami que nos lleva en volandas al 8 de marzo de 2018. Porque las mujeres paran para que el movimiento no se detenga.