Perder los patrocinadores por ser madre

Madrid

Esta deportista olímpica sevillana de 31 años domina su deporte al mismo nivel que lo hace Rafa Nadal en el tenis, Leo Messi en el fútbol o como hacía el piloto alemán Michael Schumacher en la Fórmula 1. Nada menos que seis campeonatos del mundo de Windsurf a sus espaldas y con el nombramiento de “Mejor Navegante mundial del año” en 2010, algo que en España solo había logrado Theresa Zabell.

La campeona del mundo de windsurf Blanca Manchón perdió todos sus patrocinadores cuando anunció que iba a ser madre. En 2017 tuvo que presentarse a una prueba del campeonato internacional con una vela prestada y pagándose el viaje de su bolsillo.

“Me quedé embarazada en 2016. Fui al campeonato del mundo de ese año y no me encontré bien. Estaba embarazada sin saberlo, fue cuestión de días. Competí y justo cuando terminé la competición, a mi vuelta, supe que iba a ser madre. Pensé que era el mejor momento, justo terminaba la temporada. Mis patrocinadores estuvieron informados desde el minuto uno y, supuestamente, les pareció bien”.

Su caso ha vuelto a abrir el debate sobre la maternidad en el deporte, un mundo mayoritariamente masculino donde ser mujer y querer ser madre te puede llevar a perder todos los patrocinadores, a pesar de ser la mejor en la disciplina.

Blanca cree que, en España, las mujeres madres no son rentables. Una mentalidad que identifica en el deporte y que valora de “injusta” y cuenta una experiencia propia: “En Estados Unidos cuando una deportista destaca en el colegio o el instituto es como un dios. A mí aquí me suspendieron educación física en el colegio cuando volví de competir en los juegos olímpicos de Atenas, en 2004. Me suspendieron porque mis tardes de entrenamiento coincidían con las horas de la asignatura”.