Sofá SonoroSofá Sonoro
Música
Sofá Sonoro | reportaje

La vida de las bandas sin cantantes

Toundra, Clint, Forastero, Mambo Jambo… ¿vivimos la edad de oro de la música instrumental?

Toundra durante su actuación en el Colossal Weekend Festival de Dinamarca, celebrado en 2017 / GETTY IMAGES

Madrid

Hace 20 años se debatía sobre por qué los grupos indies españoles cantaban en inglés. El debate regresó hace una década cuando Russian Red, Anni B. Sweet y Alondra Bentley irrumpieron en la escena musical. Mientras esa pregunta parece cosa del pasado y pocos interrogan sobre ello a artistas como Freedonia, Joana Serrat, Anaut o The Soul Jackett, hay una pregunta que nunca abandona a las bandas instrumentales. ¿Por qué no cantáis ninguno? “Nos lo preguntan constantemente”, reconoce Esteban Girón, guitarrista de Toundra. “Nos dicen mucho eso de que lo que más les gusta del grupo son nuestras letras”, bromea Esteban. Lo cierto es que las razones que llevan a las bandas instrumentales a renunciar a un cantante suelen ser parecidas. “La verdad es que ninguno sabe cantar”, admite el músico de Toundra. “Teníamos claro que podríamos funcionar sin uno. Lo decidimos desde el principio. Cada uno disfruta de su instrumento sin la necesidad de un cantante y hemos llegado así hasta hoy”, añade.

En el último lustro han surgido un buen número de bandas importantes que sin cantante se han hecho un hueco en la escena musical. Bandas como Toundra, Mambo Jambo, Pyramid Blue, Los Saxos del Averno, Clint o Forastero han firmado discos brillantes con los que han llamado la atención del público partiendo de géneros diferentes como el soul, el blues, el surf o el rock.

Los Coronas son, de esta lista, los que más tiempo llevan haciendo música sin cantante. El propio Fernando Pardo relataba que hasta sus amigos le miraban raro cuando decidió montar un grupo surf rock instrumental en pleno Malasaña. Eran los primeros años de la década de los noventa y aquello no se estilaba. "No lo entendían, luego llegó Tarantino con Pulp Fiction y la gente empezó a venir a vernos". Por el camino han grabado una decena de discos en algo más de veinte años, incluso encontraron cantante en la aventura que compartieron con Arizona Baby. En esto de hacer música sin cantante Los Coronas son ya veteranos y, en cierta medida, la banda que ha abierto una puerta por la que se han colado un buen puñado de grupos.

Clint, en una fotografía promocional de su último álbum / DANIEL SAN

Toundra es la banda instrumental del momento. La excepción. Un grupo que ha triunfado en España y también en el extranjero, donde suelen tocar en grandes salas con buenas ventas de entradas. Toundra se formó en Madrid, los músicos rondaban los mismos locales y aunque sus gustos musicales varían, el grupo se encuentra alrededor del punk rock el punto de partida de un sonido complejo e intenso. Un sonido sobre el que han construido una carrera que no ha parado de ganar seguidores gracias a unos buenos directos y a unos álbumes que mejoran a cada entrega. Su último trabajo, el espléndido IV, llegó al número 2 de la lista de ventas en España y este mes de abril la banda regresará con Vortex. Pero Esteban no tiene claro si la música instrumental vive un buen momento. “Creo que hace unos años incluso estaba más de moda, pero hay que seguir haciendo lo que uno disfruta sin tener en cuenta si es mejor o peor momento”, explica.

También se espera para abril la cuarta entrega de Clint, un disco que confirma todo lo bueno que ha enseñado la banda madrileña. Clint comenzó su viaje hace una década en Leganés y de inicio buscaron cantante, incluso hicieron un casting. “Era la época de ‘Operación Triunfo’ y no te puedes imaginar la gente que venía a probar. Estábamos perdiendo el tiempo, íbamos tocando y nos dimos cuenta de que no nos hacía falta un cantante”, explicaba el grupo en una entrevista. Desde entonces han funcionado así, editando una música que bien podría ser la banda sonora de una película surrealista y que sin llegar a un público masivo o reportándoles unos ingresos que les permitan dejar sus trabajos diarios sí que les da el placer de disfrutar de la música sin presiones. “Música y comercialmente viable son casi un oxímoron. Instrumental, además, es sinónimo de minoritario. Si dependiésemos del dinero de la música tendríamos un serio problema”, explica Harry El Ejecutor, guitarra rítmica de Clint.

La banda instrumental Forastero / FORASTERO

Si cuesta poner etiquetas a la música de Clint, con Forastero ya resulta imposible. El submarinista en el tejado es su último álbum, un disco extraño y genial que suena a todo (y a nada reconocible), un sonido tremendamente original que posiblemente se hubiese estropeado con cantante. Forastero es una banda con músicos curtidos como Javier Colis, Javier Díez-Ena (Dead Capo), Daniel Niño o el periodista Javier Gallego. Grandes músicos y ningún vocalista. “La ausencia de cantante te aporta más libertad y protagonismo a todos los instrumentos de la banda, que ya no tienen que estar al servicio de la voz”, explica Gallego. “También te libera de las estructuras más cerradas que giran en torno a la letra. Así que musicalmente amplía el espacio y las posibilidades. Se pueden hacer más cosas y escuchar más a los instrumentos porque no hay un vocalista captando la mayoría de la atención. Pero las ventajas también son un riesgo y una dificultad”.

Pero no tener cantante limita también a las bandas, al menos a la hora de llegar un público más amplio. “Sin duda limita”, admite Javier Gallego. “La música instrumental es minoritaria excepto en la electrónica y el jazz. Es menos conocida y, por tanto, más incomprendida y menos difundida. Luego es evidente que la voz es el instrumento que conecta de forma más directa con el público. Un tema cantado entra más fácilmente que un tema instrumental. Así que es más difícil que te pinchen en la radio. Además la música instrumental no es fácil de catalogar al ser bastante abierta. No saben dónde meterla. Al menos a nosotros nos pasa, pero también es cierto que cada vez la audiencia es más abierta y tiene menos prejuicios”, añade.

En una línea parecida opinan los chicos de Clint. “El rock instrumental es globalmente minoritario y las oportunidades -el éxito, las ventas, exposición en los medios masivos- están determinadas por factores que cada vez tienen menos que ver con las composiciones y más con los beneficios que éstas puedan generar. Pero esto no es una queja, hacer música instrumental siempre ha sido una elección y nunca una imposición”, apuntan.

Lo cierto es que todos tienen razón, la vida sin un cantante es más compleja y cierra más puertas, pero abre otras, puertas musicales sin barreras, sin vallas ni limitaciones donde la música se expande y encuentra otras dimensiones. Quizá no llegue a tanta gente, puede que no conecte con el público ni deje estampas de mecheros iluminando pabellones al ritmo de un estribillo cantado al unísono, pero aporta otras cosas, cosas que las buenas bandas saben explotar y ahora, en España, hay unas cuantas.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00