El niño es un filósofo y el filósofo es un niño

Madrid

Jordi Nomen, profesor de Filosofía y jefe del Departamento de Humanidades de la escuela Sadako de Barcelona, ha presentado en La Ventana de Carles Francino su libro "El niño filósofo" (Arpa) .Enseñar a los niños a pensar es clave para cambiar la forma de ver las cosas. "El pensamiento crítico-dice Nomen- vacuna contra los prejuicios, forja el carácter y forma ciudadanos participativos".

Irene Lozano, responsable del espacio de filosofía de la Ventana , cree que "el niño es un filósofo y el filósofo es un niño", que si la esencia de la filosofía es asombrarse ante la vida y hacerse preguntas esenciales, los más pequeños son los mejor preparados para pensar y dialogar. 

Mathew Lippman puso en marcha en Estados Unidos el programa Philosophy for children . Este método se fundamenta en la creencia de que que pensar es un entrenamiento que debe desarrollarse en la escuela. Enseñar a pensar no solo ayuda al aspecto filosófico, sino que mejora el aprendizaje de otras materias. Este método de enseñanza, que defiende Nomen en su libro,  ya es muy habitual en el Reino Unido y empieza a penetrar en España.

Uno de los aspecto más concretos que defiende Jordi Nomen es el desarrollo de un pensamiento que llama "cuidadoso". "Es aquel que nos hace tener en mente a los demás" apunta el autor de "El niño filósofo". "No se trata de salvase sólo, sino también a los otros". Si esto se tiene claro de niños, nos irá mejor de mayores.