El golpe maestro del eterno heredero
El veterano John Prine regresa a las tiendas tras trece años con un disco poderoso y necesario
John Prine durante una actuación en San Francisco en el año 2009 / GETTY IMAGES
Madrid
A John Prine le pasó lo peor que le puede suceder a un músico. Le pusieron la etiqueta de ‘el nuevo Bob Dylan’. Aquella corona pesó durante años al músico, que a pesar de ello consiguió editar discos que conquistaron tanto a público como crítica. El viaje del veterano músico ha sido largo e intenso, con grandes momentos y fases en las que estuvo más alejado de los focos.
Portada del último álbum de John Prine / THIRTY TIGERS
Portada del último álbum de John Prine / THIRTY TIGERS
Tras trece años sin presentar canciones nuevas, y tras superar un cáncer, Prine vuelve a las tiendas con uno de sus mejores discos, The Tree Of Forgiveness, un álbum mayúsculo que capta a la perfección la sabiduría que dan los años y en el que el músico reflexiona sobre la mortalidad y el paso del tiempo. El nuevo trabajo de Prine resulta crudo, vestido con poca con ropa y tremendamente cautivador. Un disco producido por Dave Cobb, responsable de los éxitos de Sturgill Simpson o Jason Isbell.
Las 10 canciones de la joya de Prine son un testamento musical en vida, un disco que conecta con el de otros veteranos que resurgieron de sus cenizas como las American Recordings de Johnny Cash, el This Old Road de Kris Kristofferson o el Home Before Dark de Neil Diamond. Las canciones de The Tree Of Forgiveness bien podrían ser un libro, un relato melancólico sobre la vida, la vejez y la muerte. Sobre la fugacidad del tiempo y la importancia de rodearse en vida de la gente adecuada. La última entrega de Prine llega tras una etapa ajetreada en la agenda del músico, que pese a llevar tiempo sin editar material nuevo editó un libro de fotografías y grabó dos discos de versiones en buena compañía. Pero la necesidad de volver a escribir, a cantar temas nuevos, fue creciendo hasta que ha explotado en esta fabulosa entrega.
En el regreso de Prine tiene mucho que ver uno de los nombres más activos de Nashville, Dan Auerbach. El líder de los Black Keys acudió a Prine el año pasado cuando estaba preparando su segundo álbum en solitario. “Fue un lujo estar junto a alguien con una creatividad tan especial”, explicó el músico a Rolling Stone. Más tarde el guitarrista ejerció de telonero en algunos conciertos de Prine y cuando el veterano músico decidió volver al estudio, Auerbach le devolvió el favor coescribiendo dos de los diez temas del disco, las poderosas Caravan of Fools y Boundless Love.
El regreso a las tiendas de John Prine es una de las sorpresas del año, un disco necesario, íntimo, crudo y sencillo, pero que recupera la capacidad lírica de este veterano artista que a sus 71 años ha aparcado la jubilación, tan de moda en estos últimos tiempos, para dar un golpe encima de la mesa y demostrar que todavía tiene cuerda, cuerda y canciones de las buenas.
