"La cocina es un lenguaje vivo que se ha ido transformando día a día durante siglos"

Madrid

La cocina ha formado parte en todo momento, de una manera o de otra, de la vida de Pepe Rodríguez. El cocinero de 'El Bohío', habla de lo que ha cambiado la situación en este país: al vivir en una casa que estaba encima de su bar, tuvo la oportunidad de tener "una universidad" a la que sus hijos no van a acudir, ya que viven en un sitio diferente.

Desde que era pequeño hasta ahora, son muchas las cosas que han cambiado en este país, también la forma de comer. Mientras que antes abundaban alimentos de casquería como los sesos, por ejemplo, por su bajo precio, a día de hoy casi todo el mundo puede acceder a productos caros, como el rodaballo: "hemos ganado cosas y perdido otras".

También comentamos la nueva moda de comida saludable: "cuidarse no es dejar de comer pan o chorizo; es comerlo con mesura", apunta.

Nuestro invitado valora el legado que le han dejado sus padres en lo referente a los hábitos de consumo: siempre que viajaban a Madrid cuando era pequeño, visitaban diferentes restaurantes. "Esa ha sido la mejor herencia que me han dejado". A Pepe le parece que la educación gastronómica deja mucho que desear: "odio a la gente que va a los restaurantes y pide menú para niños. No puedo entender que se relegue a los niños a comer croquetas, pizza, pollo..."

Nuestro invitado es cada vez más conocido por ser uno de los tres jueces de 'Masterchef', algo que ha hecho que cambie el tipo de público que acude a su casa: "la clientela es de cualquier parte de España y del mundo; es gente que ve el programa. Antes venían solo por la comida y ahora vienen por eso y también por conocer al personaje".