"Soy padre de un niño trans. Lo único que ha cambiado en él es su nombre"

Madrid

"Desde pequeño, en torno a los tres años, ya nos dejó claro que sólo llevaría pantalón, nada de faldas ni vestidos. Y los juegos a los que iba a jugar desde ese momento serían los que socialmente están asignados, mal asignados, a los niños, no a las niñas. En principio pensamos que tendría lo que se denomina comportamientos no normativos", comienza Gustavo su diario. Pero el punto de inflexión se produjo el año pasado, "tras la visita de los 9 años a la enfermera en la que nos aconseja incluirle un salvaslip en la mochila del colegio, empieza a angustiarse ante la idea de que le venga la regla. Decidimos entonces ponernos en marcha y pedir información y nuestros pasos nos llevaron hasta el Servicio de la Comunidad de Madrid para atender a personas LGBT, donde encontramos la ayuda necesaria de la mano de Isidro, el trabajador social". A partir de ahí Axel comenzó a hacer su tránsito, "y descubrimos lo que siempre llevana dentro".

El paso próximo fue "comunicarlo al entorno más próximo, familia, amigos, colegio.Y ha sido aceptado sin problema, porque realmente lo que ha cambiado en mi hijo ha sido sólo el nombre. Bueno y que ahora es más feliz, se le ha ido gran parte de la timidez que tenía.Es necesario que socialmente se de visibilidad que estos niños existen y que necesitan de una legislación adecuada a sus peculiaridades, y se necesita ya", concluye.