El líder del PP, Pablo Casado, ha responsabilizado al Gobierno de dinamitar, por sus discrepancias internas, el acuerdo político para renovar el Consejo del Poder Judicial y situar a Manuel Marchena en la presidencia. Casado, en declaraciones a la SER, ha sido muy crítico con la gestión política del Gobierno sobre esta crisis: «Quizás por rivalidades internas en el Consejo de Ministros entre miembros con acceso al Poder Judicial, lo que ha pasado es que se ha desencarrilado un pacto de Estado y encima se han tomado decisiones sobre la marcha simplemente para tensar electoralmente al partido de la oposición en plenas elecciones andaluzas, y eso es indecente». Sobre el whatsapp que envió Cosidó, el presidente de los populares ha asegurado que «rechaza» el mensaje, que ya pidió explicaciones al portavoz del PP en el Senado y que desconoce quién lo escribió, aunque señala que no cree que fuera Cosidó. Fuentes consultadas por la Cadena SER aseguran que Cosidó autorizó la difusión del whatsapp y, aunque no fue el autor, sí dejó que los suyos lo extendieran sin problema. Casado ha querido, no obstante, restar importancia al whatsapp porque entiende que “lo nuclear” fue la filtración “interesada” del Gobierno del nombre de Marchena como presidente del CGPJ “sin conocimiento del PP ni del interesado”. “En ese momento Sánchez hiere de muerte el pacto” para la renovación del poder judicial, ha dicho. Es más, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se disculpe por su actuación en todo este proceso y por el hecho de que el partido de la oposición se tenga que enterar por la prensa de este tipo de cuestiones. Casado, ha lamentado lo ocurrido el miércoles en la sesión de control al Gobierno del Congreso: «La sesión parlamentaria fue para olvidar», ha dicho. Casado también ha asegurado que es «lamentable» que el Gobierno de Pedro Sánchez «dependa de socios como Rufián». Pablo Casado, implicado al máximo nivel en sus primeras elecciones autonómicas, las del 2 de diciembre en Andalucía, ha defendido que Ciudadanos no va a superar en Andalucía al PP y se ha mostrado abierto a un pacto con los de Rivera si logran sumar una «alternativa de gobierno». Además, se ha mostrado optimista con la posibilidad de «superar a Susana Díaz». Casado ha justificado que el PP no se haya sumado a la condena al franquismo en el Senado con motivo del 20-N porque “no vamos a morder los señuelos para no hablar de lo que pasa en 2018”. Considera que el asunto “quedó perfectamente resuelto con la Constitución” y que lo que se intenta es “politizar el debate en plenas elecciones andaluzas”. El líder del PP ha dicho que la exaltación a Franco debe prohibirse “si es violenta” o “hay actos de kale borroka, como hacen la CUP y Arran en Cataluña”.