Berners-Lee defiende la neutralidad de la Red
El científico británico, considerado uno de los padres de Internet, señala que cobrar por dar prioridad a algunos datos, como defienden algunas operadoras, dividiría Internet
Uno de los científicos que participó con sus ideas y trabajo en la creación de Internet, el británico Tim Berners-Lee, ha criticado en una conferencia celebrada en Estrasburgo las gestiones realizadas por algunas compañías estadounidenses para establecer distintos niveles de acceso, advirtiendo que el mundo debería alejarse de propuestas para fragmentar la Red, que podrían llevar a ésta a "un período oscuro".
Algunos empresas del sector de las telecomunicaciones y la tecnología apoyan un modelo de Internet fragmentado, en el que quienes más paguen lograrán que sus datos circulen a una mayor velocidad. La Red quedaría de este modo, según los opositores de esta propuesta, segmentada, y dejaría de ser un sistema neutral.
Berners-Lee, quien encabeza el World Wide Web Consortium, aboga por la idea de neutralidad en la red, un concepto bajo el cual todos tienen el mismo acceso a la Internet y todos los datos que transitan cuentan con la misma prioridad. El científico británico, considerado padre de Internet, considera que la idea de cobrar por el acceso a distintos niveles no "forma parte del modelo original de la Red", según informa BBC Mundo. "Lo más importante desde mi punto de vista es que la Red sea una sola", defiende.
El científico británico desarrolló la Internet gráfica (World Wide Web) en 1989 como una herramienta académica que permitiría a los científicos compartir datos. Desde esa fecha la red ha tenido un crecimiento explosivo y ya no es una simple herramienta académica. Afirma Berners-Lee "uno logra una tremenda satisfacción cuando uno se pone a buscar y encuentra un sitio que no estaba buscando" y que "cualquiera que quiera dividir Internet en dos descubrirá que su mitad será muy aburrida".
Empresas como Microsoft y Google respaldan la visión de una Red neutral, y se han pronunciado a favor de leyes que garanticen ese sistema. Sin embargo empresas de telecomunicaciones estadounidenses defienden un sistema de dos niveles en el que los datos de compañías e instituciones que pueden pagar aranceles tendrán prioridad sobre los que no están dispuestos a hacerlo.
Quienes se oponen a dividir la red aseguran que hacerlo dañaría el modelo abierto de la en el que ésta se basa, pues los proveedores asumirían un papel de controladores de los contenidos. También existe el temor de que muchas instituciones como universidades y organizaciones caritativas quedarían rezagadas por su falta de capacidad económica para solventar costos más elevados.