Israel bombardea con misiles la oficina del primer ministro de Gaza
La nueva ofensiva se produce tras el anuncio de los palestinos de la suspensión de las negociaciones de paz con Israel. La ONU condena el "excesivo" uso de la fuerza por parte de israel
Gaza
La aviación israelí ha bombardeado en las primeras horas de este domingo la oficina del depuesto primer ministro palestino, Ismail Haniyeh. Varios testigos han confirmado que el ejército israelí ha lanzado dos misiles contra el edificio del movimiento islamista Hamás, en la parte occidental de la ciudad de Gaza, donde está la oficina de Haniyeh.
No se dispone de información aún sobre si el ataque ha causado víctimas, pero lo que sí se sabe es que ha causado grandes daños materiales en el inmueble bombardeado.
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El ataque se suma a la ofensiva militar que Israel desarrolla desde el pasado miércoles sobre Gaza, que hasta ahora se ha cobrado la vida de más de 80 palestinos, incluidos menores, y ha dejado en torno a doscientos heridos.
El bombardeo se produce también pocas horas después de que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) haya decidido suspender las negociaciones de paz con Israel. La situación de violencia generada desde el pasado miércoles, cuando comenzó la ofensiva, ha llevado al jefe negociador palestino y ex primer ministro, Ahmed Qurea, a notificar la suspensión de las conversaciones de paz que mantiene en los últimos meses con la jefa de la diplomacia israelí, Tzipi Livni. Según recoge la edición electrónica del diario Haaretz, Qurea ha anunciado a Livni que suspenderá la negociación de paz, aunque la información no ha sido confirmada por ningún canal oficial.
Mientras, el asesor presidencial, Saeb Erekat, ha afirmado que la negociación con Israel "ha quedado enterrada debajo de los escombros de las viviendas destruidas en Gaza". A su vez, centenares de palestinos se concentraban la tarde del sábado en la céntrica plaza Al Manara de Ramala para expresar su repulsa por lo que sucede en Gaza y exhortar al presidente Abbas a interrumpir la negociación con Israel. "No a la negociación con la sangre de nuestro pueblo", rezaba una de las pancartas que se podían leer en la protesta.
En respuesta a estas declaraciones, Livni ha declarado que las amenazas de suspender las negociaciones no afectarán al desarrollo de la ofensiva en la franja de Gaza. "Incluso si los palestinos desean interrumpir las conversaciones de paz con Israel, no tendrá ningún efecto sobre las decisiones israelíes en Gaza", ha recalcado la dirigente.
Reunión urgente
Para analizar la situación en la zona, el Consejo de Seguridad de la ONU ha convocado una reunión de urgencia para la tarde del sábado en Nueva York (madrugada del domingo en la península española), en respuesta a la petición del presidente palestino, Mahmud Abbas, que realizó un llamamiento tras manifestar que lo ocurrido esta semana en Gaza "es peor que el holocausto".
Fuentes de la unidad de negociaciones de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) han asegurado que el próximo martes Abbas tiene previsto entrevistarse con el primer ministro israelí, Ehud Olmert, en el marco de las reuniones quincenales que ambos dirigentes mantienen desde diciembre, cuando se reanudó el proceso de paz iniciado en noviembre en la cumbre de Annapolis (EE UU).
Algunas fuentes indican que la inminente visita a la región de la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, podría suponer un elemento de presión que obligara a las partes a celebrar el encuentro.
También el alto representante de Política Exterior y Seguridad Común de la Unión Europea (UE), el español Javier Solana, visita la región en una gira que comienza este domingo.
Semana sangrienta
Israel inició la noche del viernes una incursión en el norte de la franja de Gaza que se ha convertido en la más sangrienta desde 2005, cuando evacuó a los 8.000 colonos que vivían en asentamientos judíos en este territorio palestino.
Las últimas víctimas mortales son cuatro palestinos que han fallecido en la noche de este sábado en un bombardeo de una comisaría en la ciudad de Rafah, según testigos presenciales, además de un militante de Hamás en el campo de refugiados de Al-Bureij. El resultado provisional de víctimas mortales de la operación israelí, que todavía asciende a modo de goteo, supera los 57, entre ellos numerosos civiles y al menos 15 menores, incluidos varios niños y dos bebés, según fuentes sanitarias de Gaza.
El jefe del servicio de urgencias del Ministerio de Sanidad en Gaza, Moawiya Hasanín, ha cifrado en 86 (sin incluir los últimos cinco de la noche) los fallecidos desde el pasado miércoles, cuando se inició la ofensiva militar de Israel, mientras que los heridos, decenas de ellos graves, superan los 200.
La operación de este sábado, apoyada por artillería, tropas de infantería y la Fuerza Aérea israelí, ha tenido como centro el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de la franja, aunque también varios objetivos colindantes, el sur y en la propia ciudad de Gaza.
En los combates entre soldados israelíes y milicianos que salieron a resistir la invasión, el Gobierno israelí han confirmado dos bajas mortales y cinco heridos entre las filas de su ejército.
Las milicias palestinas han disparado decenas de cohetes artesanales Al Kasam y cohetes Grad de medio alcance contra localidades israelíes, que han causado una docena de heridos, entre ellos dos menores que fueron hospitalizados tras recibir impactos de metralla.
