Adiós definitivo de Romario al fútbol
El brasileño, que fue proclamado mejor jugador del mundo por la FIFA en 1994, cuelga las botas a sus 42 años
Río de Janeiro
El ex número uno del mundo, el brasileño Romario ha anunciado su retirada definitiva del fútbol, a los 42 años de edad, después de meses de especulaciones tras su polémica salida del Vasco da Gama
"Paré. Mi fase pasó. Oficialmente para mí ya fue suficiente", ha dicho Romario a los periodistas durante la presentación de un dvd con la recopilación de 900 de los mil goles de su carrera deportiva, que presentó la noche del lunes en Río de Janeiro. "Aproveché hasta cuando pude, pero no puedo seguir más a los compañeros. Soy una persona que hizo todo lo que quería en el fútbol", ha añadido.
Más información
El "Baixinho", que tiene en su gloria el Campeonato del Mundo con Brasil en 1994, año que fue proclamado mejor jugador del mundo por la FIFA, ha asegurado que quiere jugar un último partido de despedida, en el Maracaná, en el que vestirá la camiseta de clubes como el Vasco da Gama, el Flamengo y el Fluminense.
Romario no juega un partido desde el final del pasado campeonato brasileño, cuando terminó envuelto en una amarga acusación y condena por dopaje. El delantero fue condenado por el consumo de finasterida, una sustancia para prevenir la caída del cabello, que confesó haber tomado durante más de una década, y que estaba prohibida porque puede enmascarar el uso de anabolizantes. Romario fue finalmente absuelto el pasado 14 de febrero, en el juicio de apelación, en el que dio rienda suelta a sus emociones y a las lágrimas por ver su nombre limpio. No obstante, el ídolo de clubes como el Barcelona español o el PSV Eindhoveen holandés no volvió a calzarse unas botas de fútbol en un partido profesional.
Entonces se estaba encargando de entrenar a su club, el Vasco da Gama, en el que se supone que simultaneaba la tarea de jugador. Pero justo después de su absolución abandonó el club por divergencias con el presidente, Eurico Miranda. Desde entonces, como él reconoció, ha engordado cuatro kilos y ahora ya es difícil recuperar la forma. Precisamente en el Vasco obtuvo su último logro como jugador: llegó a los mil goles en el cómputo global de su carrera, en mayo del año pasado. Esta cifra sólo había sido alcanzada por el "Rey" Pelé, quien paró en los 1.282 tantos.
1002 goles
A lo largo de su extensa carrera, Romario ganó tres ligas holandesas con el PSV, una liga española con el Barcelona y varios títulos brasileños con el Flamengo y el Vasco da Gama.
Muchos lo recordarán por su olfato de gol sin igual, sus vertiginosos regates, como aquella "cola de vaca" que realizó en las filas del Barcelona en 1994, en el clásico español ante el Real Madrid. El brasileño ejecutó un imposible giro de casi 180 grados que quebró la cintura del defensor del Real Madrid Rafael Alkorta, y después batió al cancerbero blanco con un tiro bajo cruzado, abriendo el marcador, que terminó 3-0 para los culés.
Otros, sin embargo, recordarán sus miles de polémicas y su afición por las fiestas, que le valieron ser apartado de equipos como el Barcelona o el Valencia. Su osadía y su amor por este deporte le han llevado a ser uno de los más laureados de la historia del fútbol brasileño, sobre todo, por su brillante actuación en el ansiado tetra-campeonato mundial de Brasil, en Estados Unidos, en el año más glorioso para el Baixinho, en 1994.