Los saharauis, en la encrucijada

Poco ha cambiado en los últimos 25 años en los campamentos de refugiados saharauis asentados en Argelia. Ese es el principal problema al que se enfrentan las más de 300.000 personas que viven lejos del Sáhara Occidental. Las nuevas generaciones siguen reclamando a Marruecos la independencia de este territorio y aseguran que están dispuestas a todo para conseguirlo.

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Los refugiados saharauis a este lado de la frontera viven en una continua contradicción. Sueñan con volver al Sáhara Occidental pero se enfrentan a las nuevas generaciones que se sienten tentadas a sentir como propia la tierra que Argelia les ha cedido.

Viven de prestado, en campos de refugiados que deberían ser provisionales pero el paso del tiempo les ha obligado a desarrollar una estructura política y social que les asienta cada vez más lejos su sueño. Quieren la paz pero no descartan las armas si las negociaciones internacionales no les dan lo que reclaman.

A todas estas dudas y contradicciones se suma un rosario de intereses políticos y económicos que condena a las familias que sobreviven en haimas y en casas de adobe y uralita en medio del desierto. Es en estos hogares donde habita la resistencia real del pueblo saharaui. Lo más cotidiano se convierte para ellos en una lucha desigual contra el desierto para poder tener cada día el agua, la luz y la comida suficiente para vivir.

En medio de estas circunstancias, todavía encuentran tiempo para disfrutar de los suyos entorno al ritual del té o echando una partida de cartas al atardecer. Es ahí donde aprovechan para intercambiar impresiones sobre su futuro. Quizás preguntándose si alguien todavía se acordará de ellos entre tanto discurso político.

La Cadena SER en la Columna de los 1.000

El próximo viernes miles de personas llegadas de diferentes puntos de España formarán una cadena humana frente al muro de separación construido por Marruecos para aislar el Sáhara Occidental de los campos de refugiados saharauis en Argelia. La SER acompaña la protesta de estos activistas.