Rajoy, convencido de que ni "Zapatero, Pepiño, Rubalcaba o Chacón" le harán sombra en las urnas

No importa el rival. Mariano Rajoy, presidente del PP, no teme al actual presidente del Gobierno, ni al vicepresidente, ni al ministro de Fomento, ni a la de Defensa. Seguro de que España va a experimentar un cambio político tras la próxima batalla en las urnas, al compostelano le trae "completamente sin cuidado" que los socialistas acudan al campo liderados por "Zapatero, Pepiño, Rubalcaba o Chacón".

Rajoy ha asegurado estar "preparado" para asumir la dirección del país y ha hecho hincapié en que su equipo hay personas muy capaces de "afrontar los grandes retos del futuro". El líder popular ha prometido en la clausura de la Junta Regional de su partido en Ciudad Real que "las cosas se pueden hacer y se van a hacer de otra manera", ya que mantiene que "España, con un Gobierno mínimamente normal, sale de la crisis".

Pero para ello, en palabras de Rajoy, es necesario "recuperar la confianza", algo que "no es posible" mientras el Ejecutivo esté en manos del equipo de Zapatero: "Es muy difícil confiar en alguien que tiene un criterio que cambia cada media hora, que es lo peor que puede ocurrir en la vida, porque genera incertidumbre, dudas y desconfianza". Como alternativa, el santiagués presentó a su partido, que, tal y como dijo, está "dispuesto y deseoso" de ayudar a "la gente que lo está pasando mal", de "construir un Gobierno en el que todo el mundo se sienta representado, moderado, centrista, integrador y reformista".

"El problema de España no es ideológico, es un problema de competencia a la hora de gestionar los asuntos públicos", ha dicho el líder de la oposición, que, seguidamente, explicó que está en contra de "las políticas disparatadas que nos han conducido a la triste situación de estos momentos".