''Con la música me basta para ser feliz''

Xoel López acaba de cumplir 34 años y, por primera vez en su carrera, después de seis discos como Deluxe y tres más a dúo con Félix Arias como Lovely Luna, prepara un álbum que firmará con su nombre. ¿Cambio de ciclo? "Aún es pronto para decirlo", asegura. Salvo cambio de última hora, el disco será doble y llamará Atlántico. La primera parte se publicará (seguramente) en abril y esta semana, justo antes de su concierto de ayer en el Festival Ebrovisión, ha estado ultimando el trabajo de grabación. Pero la SER le llamó (el pasado martes) por teléfono y Xoel López tuvo la gentileza de responder...

¿Qué estabas haciendo hasta que te ha sonado el móvil?

Escuchar una canción que grabamos ayer [por el lunes] y que se llama 'Buenos Aires', para ver si la toma de voz ha quedado bien, si nos gusta... y planteándome qué queda para terminarla. Ahora estamos con esa y luego nos pondremos con la última, que se llama 'La gran montaña'.

¿'Buenos Aires' es una canción de amor?

No exactamente pero en todas las canciones hay amor. Es un sentimiento que aparece en cualquier letra de más de dos frases. Pero amor universal, no de pareja...

¿Buenos Aires es la tercera ciudad en la que vives?

Bueno, si vivir dos meses lo contamos como 'vivir', añadiría Nueva York. Pero vamos, me crié en La Coruña y viví allí hasta los 18 años. Luego, Santiago, Madrid, Salamanca... y ahora Buenos Aires desde hace dos años.

¿Qué has encontrado allí?

No tengo fijación por la ciudad. Estoy ahí como podría estar en cualquier parte. Me pasaba lo mismo con Madrid o con Santiago... Son cosas circunstanciales.

Este será tu primer disco firmado como Xoel López. ¿Matar a Deluxe es un poco como matar al padre, no?

Hace tiempo que quería hacerlo, la verdad. Deluxe nació en otro momento de mi vida, con otra idea... y había que dar el paso de enfrentarme a mi propio nombre, al músico que soy. Llevo toda la vida dedicándome a esto, desde pequeño, y no soy otra cosa. Además así puedo tocar canciones de Deluxe o de Lovely Luna sin que la gente espere una cosa u otra. Así tengo menos obligaciones.

El éxito de If things were to go wrong marcó un cambio de ciclo en tu carrera. Después de tu experiencia con La Caravana Americana ¿Atlántico marcará tu segundo gran cambio de rumbo?

Hombre... Yo destacaría bastante la época Fin de un viaje infinito (2007) y Reconstrucción (2008), que para mí fueron artísticamente importantes. Pero sé lo que dices. If things fue el primer disco que llegó a más gente. Fue entonces cuando empecé a dedicarme solo a la música, a vivir de los discos y las giras... A nivel de estilo If things fue más bien el final de una época en la que yo era más fan de la música que autor en sí. Con los últimos discos, en cambio, creo que ya hay una personalidad más marcada. Y ahora... No sé, es pronto para decirlo. Yo noto que hay cambios en mi forma de ver las cosas, en cómo entiendo mi carrera... pero es pronto.

¿A qué cambios te refieres?

Ya no me doy las palizas que me daba antes, con gira, promoción, entrevistas... y tampoco lo echo de menos, la verdad. No echo de menos contar lo que me pasa porque lo que quiero es ¡vivirlo y ya está! Ahora me apetece más tocar en menos sitios pero más entrañables, primar la belleza a la cantidad.

¿Está saliendo el gourmet que llevas dentro?

Bueno, me da un poco más igual lo que pueda pasar. No me voy a dejar influir por lo que se supone que hay que hacer, por donde se supone que tienes que estar. Inconscientemente la sociedad te pone metas. Te dice que hay ir a tocar un sitio y llenarlo, que hay que tocar en tal festival como cabeza de cartel, que tienes que ser de los números 1... Y yo ya paso de eso, la verdad. Me da igual tocar en sitios pequeñitos. Que me salgan 80 conciertos no quiere decir que haga 80 conciertos. A lo mejor decido hacer solamente 12.

Dices que no te vas a dejar influir pero, en realidad, cuando sacaste Los jóvenes mueren antes de tiempo (2003) ya decías que ibas a tu bola y rechazabas las expectativas...

Sí pero ahora más. Yo tocaba durante todo el año y eso es algo que no quiero repetir. Tocar tanto y no tener vida personal, que el trabajo te absorba tanto... Me gusta la música pero lo que conlleva. Es como si un abogado te dijese que no quiere trabajar tanto, que prefiere tener una casa más pequeña. A mí me enriquece la música y con eso me basta para ser feliz.

¿Sigues disfrutando al tocar 'Que no' en directo?

Normalmente no la toco, no está en los set list... Pero en los conciertos, cuando salgo en los bises, yo solo con la guitarra, muchas veces me la piden. Y depende del momento, de que me apetezca a mí o de que me apetezca complacer... Pero sí, claro. El subidón de la gente me da subidón.

¿Qué estás escuchando últimamente?

Estoy recuperando a Tim Buckley, el padre de Jeff Buckley.