Stoner comienza el año pulverizando récords

Stoner logró su mejor vuelta rápida, 1:59.605, en el segundo giro de los veintiuno que completó en la tercera y última jornada de entrenamientos, en la que la lluvia se erigió en protagonista al caer tímidamente durante la mañana y arreciar con carácter tropical algo más de una hora antes de que concluyesen las pruebas.

Al campeón del mundo de 2011 le bastaron dos vueltas para dejar claro que con la moto de 1.000 c.c. es mucho más efectivo y rápido que con la 800 c.c. y por si había alguna duda su registro fue el único en romper la barrera de los dos minutos y, además, con casi un segundo de diferencia sobre el anterior récord de la pista, que estaba en poder del italiano Valentino Rossi, cuando todavía era piloto de Yamaha en 2009, con un tiempo de 2:00.518.

Quien más se acercó a Stoner fue el anterior campeón del mundo, el español Jorge Lorenzo, quien colocó la Yamaha YZR M 1 a algo más de medio segundo en el decimoctavo giro que realizó, si bien en su caso completó muchas más vueltas que el australiano, 35 por 21.

La tercera plaza de la última jornada fue para Dani Pedrosa con la segunda Honda oficial y a poco más de una décima de segundo de Lorenzo, mientras que el estadounidense Ben Spies (Yamaha YZR M 1), que sufrió una caída en su sexto giro, acabó cuarto y fue de los primeros en dejar la pista.

La quinta plaza fue para el italiano Valentino Rossi, quien avanzó claramente en la evolución de su nueva moto, la Ducati Desmosedici GP12, al rebajar en más de un segundo su tiempo del primer día y quedarse a poco más de un segundo del nuevo récord de Casey Stoner, lo que obviamente le sitúa dentro de los objetivos que se había marcado al llegar a Malasia.

Tanto Rossi como el ingeniero de Ducati, Filipo Preziosi, consideran que el nacimiento de la nueva moto ha sido bueno, máxime si se tiene en cuenta que el hecho de que un prototipo con apenas días de vida se haya podido codear entre los mejores de la cilindrada ya es un referente válido para sacar a la luz el potencial del mismo.

Justo tras Rossi, a escasamente una décima de segundo, acabó el español Héctor Barberá con la 'vieja' Ducati Desmosedici y por delante del británico Cal Crutchlow (Yamaha YZR M 1), quien como Spies sufrió una caída sin consecuencias durante la jornada. Sólo la nueva CRT (Claiming Rules Team) del estadounidense Colin Edwards, el motor BMW con chasis Suter fue capaz de acercarse, aunque a no menos de cinco segundos, a los registros de las nuevas MotoGP de 1.000 c.c., lo que pone en evidencia el largo camino que todavía le queda por recorrer al nuevo reglamento técnico para acercarse a los potentes prototipos actuales.