El presidente griego apura un pacto de Gobierno 'in extremis'

Karolos Papoulias, retoma este martes por la mañana las conversaciones con todos los partidos para tratar de cerrar un acuerdo de Gobierno, pero el líder del Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK), Karolos Papoulias, ya ha advertido de que hay pocas posibilidades de éxito: "No soy optimista" y pone sobre la mesa la posibilidad de volver a crear un ejecutivo de tecnócratas que se había descartado con la convocatoria de las últimas elecciones

Las formaciones están citadas para tratar de determinar la formación de un ejecutivo que se resiste desde las elecciones parlamentarias celebradas el pasado 6 de mayo.

La reunión llega tras dos rondas de negociaciones infructuosas entre Papoulias y los líderes de los partidos. "Las cosas están difíciles. No soy optimista", ha admitido Venizelos, que ha instado a todas las partes a acercar posturas para resolver la crisis.

Al encuentro de este martes asistirán también representantes de los dos partidos que se oponen al plan de rescate acordado por Atenas con la UE y el Fondo Monetario Internacional, la Coalición de la Izquierda Radical (SYRIZA) y la Izquierda Democrática, según fuentes de ambos partidos. Bastaría el apoyo de uno de estos partidos al tándem Nueva Democracia-PASOK, favorable al rescate y los recortes impuestos, para sacar adelante un gobierno de coalición, pero ninguna formación se ha mostrado receptiva.

Gobierno de tecnócratas

En vista de la falta de acuerdo, y mientras crece la posibilidad de una nueva convocatoria electoral, Papoulias ha vuelto a poner sobre la mesa retomar el modelo de un gobierno de tecnócratas, sistema que ya se utilizó para salvar a Grecia el año pasado y que se daba por concluido con la convocatoria de las últimas elecciones.

Sin embargo, SYRIZA, el segundo partido con más escaños en el Parlamento, ya ha rechazado dicha posibilidad en boca de su portavoz, Panos Skourletis. En este sentido, ha confirmado que se reunirán con el presidente pero no variarán su postura, lo que pasa por "no consentir ningún tipo de medidas de rescate aunque sean aplicadas por personas ajenas a la política".