Solo cinco agentes de seguridad privada estaban en el único acceso controlado

Fuentes policiales han confirmado a la Cadena SER que había 38 agentes de seguridad, de los que solo cinco, según fuentes de empresas de seguridad privada, estaban desplegados en el único punto de acceso controlado. Los otros 33 se encontraban fuera del pabellón, rodeándolo de forma perimetral. El resto de personal, alrededor de 70 personas, pertenecen a una empresa auxiliar sin competencias de seguridad, que funcionaban esa noche como controladores de acceso. Hay una recomendación del Ministerio del Interior, no vinculante solo informativa, que recomienda cuatro vigilantes de seguridad por cada mil personas de aforo.

De los 38 agentes de seguridad privada contratados por la administración de la empresa Seguríber, solo cinco estaban desplegados en uno de los controles de acceso. El pabellón Madrid Arena tiene cinco puntos de acceso y solo en uno había agentes de seguridad, según fuentes de empresas de seguridad privada.

Seguríber reconoce en un comunicado que les correspondía la seguridad exterior y la requisa. Lo cierto es que la ley de seguridad privada 23/92 no obliga a que haya seguridad privada dentro del recinto. Esta ley dice que los servicios de seguridad privada serán realizados por empresas de seguridad y que la utilización de medios de seguridad como el cacheo deben ser realizados por agentes de seguridad.

De la seguridad interior se encargó el grupo Kontrol 34, contratado por la empresa organizadora del evento y que, según el plan de seguridad presentado, contaba con 75 operativos.