Maduro, investido presidente de Venezuela

El ganador de las elecciones del pasado 14 de abril, Nicolás Maduro, ha sido investido como presidente para culminar en 2019 el mandato que comenzó el pasado 10 de enero el fallecido Hugo Chávez. "Lo juro delante de esta Constitución aprobada por el pueblo", ha dicho Maduro con la Carta Magna en la mano ante el presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello.

Tras el juramento, Cabello ha pedido a María Gabriela Chávez, hija del fallecido presidente, que lo acompañarla imponerle juntos la banda presidencial a Maduro. El nuevo presidente ha recibido los símbolos de la Jefatura del Estado delante de un retrato de Simón Bolívar y otro de Chávez en el que aparecían escritas las palabras "hasta la victoria siempre comandante". Luego ha sonado una grabación con el himno de Venezuela cantado por Chávez en uno de sus tantos actos públicos.

Maduro ha jurado su cargo ante la Asamblea Nacional con escasa presencia de mandatarios internacionales, como muestra de las dudas de la comunidad internacional sobre el resultado electoral. Al acto han asistido jefes de Estado y de Gobierno de 17 países y más de 60 delegaciones oficiales, entre ellas la argentina, con Cristina Fernández al frente, la boliviana encabezada por Evo Morales y la iraní que presidirá Mahmud Ahmadineyad.

La delegación española ha estado liderada por el presidente del Congreso Jesús Posada, y no por el príncipe Felipe, como suele ser habitual. Tampoco han estado presentes los diputados de la oposición venezolana, tras calificar de "gorila" la actitud del presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, que les ha prohibido tomar la palabra en el legislativo mientras no reconozcan la victoria de Maduro. La oposición considera a Cabello responsable de la agresión que sufrieron este martes dos de sus diputados.

El nuevo presidente ha asegurado que está dispuesto a dialogar con el líder de la oposición, Henrique Capriles, para que "cese en su odio", y con quienes votaron en su contra en las elecciones del pasado día 14. Maduro ha llamado, no obstante, "nuevo Carmona" a Capriles, en alusión a Pedro Carmona, efímero presidente autoproclamado durante el fallido golpe de Estado de 2002, y lo acusó de intolerancia contra el pueblo venezolano y latinoamericano. "Estoy dispuesto a conversar hasta con el diablo, que Dios me perdone, hasta con el nuevo Carmona si es necesario para que cese en su odio contra mí, contra el pueblo, para que cese en su intolerancia", ha afirmado Maduro durante su discurso de investidura El nuevo presidente, de 50 años, tendió también la mano a quienes votaron en su contra en las elecciones del domingo, y aseguró que quiere mantener un diálogo directamente con esa parte de la población.

"Las elecciones pasaron, hay saldos dramáticos de la violencia. Yo a ustedes los llamo, a todo el pueblo, a los hombres y mujeres que por alguna razón votaron contra el candidato de la patria y contra este proyecto de democracia y de socialismo", ha añadido en alusión a su propuesta política. Al menos 8 muertos y 61 heridos se produjeron en los incidentes registrados tras las protestas de la oposición el lunes al ser proclamado ese mismo día Maduro como ganador de los comicios. "Yo les tiendo la mano, yo quiero trabajar con ustedes", ha indicado Maduro, en un discurso plagado de acusaciones a "una parte" de la oposición a la que tildó de xenofobia, de racismo y de golpismo.

Un espontáneo interrumpe durante unos segundos el primer discurso de Maduro

Un espontáneo vestido con una camiseta roja, el color que identifica a los chavistas, ha interrumpido durante unos segundos al presidente venezolano, Nicolás Maduro, en su primer discurso como mandatario en la Asamblea Nacional. Minutos después de tomar la palabra tras haber sido investido presidente, Maduro ha sido desplazado del atril por un espontáneo con camiseta roja, que ha intentado dirigirse al público pero ha sido reducido por las fuerzas de seguridad. "`Nicolás! Me llamo", ha gritado el espontáneo, que no ha podido continuar su frase dirigiéndose al micrófono al ser detenido por los escoltas. Maduro, que se había apartado al verle llegar al atril, ha vuelto a su lugar y ha explicado que "ha fallado la seguridad". El presidente de Venezuela ha dicho que el espontáneo era un "compañero" y ha afirmado que "cualquier ciudadano tiene que entender que este es un evento que tiene sus reglas y tiene que ser respetado". "Después conversaremos con este muchacho", pero "lo que ha hecho está mal hecho", ha concluido el presidente, antes de retomar su discurso.