García Carrión: "La clave del éxito es la preocupación permanente por la tecnología, el I+D y la calidad"

El sector agroalimentario es uno de los pocos por donde la crisis ha pasado de puntillas. En 2012, España exportó cerca de 36.000 millones de euros, situándose está industria en la octava posición mundial. Uno de los principales contribuyentes ha sido García Carrión, una empresa con una historia de 125 años que ha conseguido posicionarse entre las compañías más importantes del sector de las bebidas y de la agroalimentación.

García Carrión ya es por volumen de negocio y capacidad de producción, la cuarta compañía de agroalimentación del mundo y la segunda de bebidas. Sus exportaciones se extienden a 155 países, una internacionalización que le ha permitido capear la crisis y seguir apostando por la innovación.

En nuestra visita por una de las siete plantas que tiene en España, la de Daimiel (Ciudad Real), las palabras más repetidas son calidad y control, los pilares del éxito del fundador de la compañía, José García Carrión. Para él, la clave para que la marca siga con tan buena salud es "la preocupación permanente por la tecnología, por los costes, por el I+D, y por supuesto la calidad como sagrada".

La cara más reconocible de la compañía es Don Simón, "una marca única y cercana" para García Carrión que "todo el mundo le tiene cariño porque hay una generación que se criado con ella". Pero si por otra cosa se le conoce a la empresa, es por inventar el vino en tetra brick, una muestra clara del carácter innovador y "un desafío en su momento a los envases tradicionales".

Sin embargo, muchas veces tanta creación asume José García, que en algún momento les ha jugado una mala pasada. Un ejemplo, fue el lanzamiento con poco éxito del vino sin alcohol hace 20 años. En estos casos, por experiencia aconseja "levantarse cada vez que haya un tropiezo". Recomendaciones que le han servido para hacer negocio en tiempos de crisis. Asegura que la compañía estaba preparada, después de haber invertido en 12 años 700 millones de euros, modernizando las instalaciones y robotizando las plantas con tecnología propia. De ello, dan debida cuenta en la planta de Daimiel. Allí su director de gestión, José Luís Muñoz nos comenta que "la única manera de optimizar costes es automatizando y teniendo la gente estrictamente necesaria".

Investigación e innovación

Otra parte importante del crecimiento de la empresa pasa por el laboratorio. Investigación e innovación, a partes iguales que según Juan Gabriel, director de I+D+i, ha tenido su base en la diversificación del producto. "Nosotros estamos investigando nuevas frutas, en la categoría de zumos y néctares". La apertura a otros países también obliga a contemplar nuevas fórmulas y productos, "bebidas a base de frutas y sabores que no están de moda en España, pero que lo están en otros mercados".