La AUGC denuncia "acoso constante" a los agentes en la frontera de Gibraltar

Resaltan la legalidad de los controles "más que justificados" que realizan en la verja al tratarse de una frontera fuera del tratado Schengen sensible al narcotráfico, el contrabando y la evasión fiscal.

La asociación mayoritaria de la Guardia Civil denuncia presiones en su trabajo diario en la zona de Gibraltar, hablan "acoso profesional" en referencia a una página web en la que se difunden fotografías e insultos a los agentes. Juan Antonio Delgado, portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) denuncia "lo que supone estar trabajando y que haya personas al otro lado de la frontera, en Gibraltar, fotografiando a los agentes". Fotografías de policías y guardia civiles que después aparecen colgadas en una página web con insultos del tipo "estos son los maltratadores, estos son los criminales". Desde la AUGC piden algo más de apoyo al Ejecutivo e instan al Fiscal General del Estado a que investigue quién está de esa página. "Una web alojada en un portal inglés", apunta Delgado. "No sabemos quién está detrás de la página ni las personas que hacen las fotografías están detrás de la verja, pedimos apoyo a las autoridades de Gibraltar pero hacen caso omiso".

Delgado asegura que insultar así a los guardias civiles "supone cuánto menos un delito de injurias contra los trabajadores públicos. Esto ocurre con la presión diaria de trabajar ocho horas al día abriendo vehículos, revisando documentación en un momento de tensión como el actual. Si a eso sumamos ser fotografiado y aparecer en una web es una presión constanten en la aduana de Gibraltar", concluye.

A principios de agosto, el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, hizo referencia a esta página y advirtió de que es "un ataque a las fuerzas de seguridad y al estado de derecho intolerable".

Controles legales

Desde la AUGC subrayan que cumplen órdenes estrictamente legales en referencia a los controles en la verja, ya que la frontera del Peñón está fuera del Tratado Schengen y exige mayores controles. Se trata un paso, aseguran, sensible al narcocotrafico, el contrabando y la evasión fiscal. A modo de ejemplo, Delgado recuerda que por Cádiz pasa la mitad del hachís que se vende en Europa.