Las adicciones de Belén Esteban y la audiencia

Belén Esteban es, para muchos espectadores, el equivalente a una droga televisiva. No pueden evitar sintonizar el canal o programa en el que Belén, por enésima vez, hablará de sus problemas con esa habitual fuerza interior que caracteriza a la que alguien apodó como 'princesa del pueblo'. Baste para ilustrar esto la audiencia conseguida por alguno de sus regresos a televisión.

Regresos que, en la mayoría de los casos, coinciden con una mejoría en el proceso de recuperación de Belén de su adicción a las drogas. Y regresos en los que Belén suele someterse a una entrevista muy personal en el que ella se abre de par en par.

Este viernes, Belén Esteban volvía a televisión. Lo hacía después de varios meses fuera de los focos. En abril de 2013, su compañero en 'Sálvame', Jorge Javier Vázquez, ya comentó en el programa que procurarían "intentar, al menos durante un tiempo, dejar de hablar de Belén y esperando que esto le ayude a estar más tranquila, a serenarse". Jorge Javier ya dejaba entrever que la marcha de La Esteban se debía a problemas serios: "Va a tener que ser la familia la que tenga que tomar decisiones y probablemente alguna en contra de lo que [Belén] quiera [...] Que no dejen esto en manos de Belén porque ella en estos momentos de su vida es incapaz de decidir".

Han sido más de seis meses fuera del circo televisivo al que tanto le debe Belén y que tanto le ha hecho sufrir también. En su regreso, rompió el audímetro del programa: 3.113.000 de espectadores y un 25,7% de cuota de pantalla. Para entender la relevancia de esta cifra, basta con mirar la audiencia de su máximo competidor, que fue el cine de La 1. La película 'Negociador' cosechó un 9,6% de share con 1.538.000 espectadores. Es decir, 'Sálvame Deluxe', con la entrevista a Belén Esteban, casi triplicó a su más inmediato perseguidor.

Admitió sus problemas con las drogas

En la entrevista Belén confesó que abandonó la televisión por "una serie de cosas, no sólo era un problema, tenía varios problemas. Era como un embudo y no podía salir de él". Aseguró que lo peor era ir a trabajar y "tener que mentir, mentir sobre cosas que pasaban en mi vida y no podían tapar".

En principio, Belén intentaba evitar pronunciarse a las claras sobre el tema de su adicción a las drogas. Usó expresiones como "Me metí en un pozo que no podía salir", "No voy a decir una palabra porque no me gusta, creo que todo el mundo sabe de qué va"... Sin embargo, comenzó, con mucha tranquilidad, a adentrarse en ese terreno: "Mis jefes me buscaron el mejor médico que había en toda España. Me puse en manos de un tratamiento muy fuerte", confesó. "Lo he pasado muy mal, muy mal, muy mal... pero me he dado cuenta de que soy una persona fuerte y luchadora [...] Soy otra Belén Esteban".

Finalmente, dio el paso y admitió a las claras qué tipo de problemas -además de personales- ha tenido que hacer frente en estos meses: "Problemas de adicciones que ya no existen. Voy todas las semanas a hacerme análisis de todo. Belén Esteban está por fuera y por dentro limpia. Ha salido del túnel".

Esta entrevista ha supuesto el segundo mejor dato de la historia de este programa. De los 10 'Sálvame Deluxe' más vistos, en 6 de ellos ha estado presente Belén o han tenido que ver con ella, como la entrevista a su expareja Fran Álvarez, entrevistado en octubre de 2010 con unos datos de audiencia del 23,3% y 2.945.000 espectadores.

Los tres programa más vistos de 'Sálvame Deluxe' coinciden con el hecho de tener a Belén como protagonista. El que más espectadores reunió (3.147.000 y 26% de share) se emitió en diciembre de 2009: Belén presentaba al mundo su nueva nariz.

El año pasado, ya protagonizó un episodio parecido al de este viernes. A mediados de 2012, Belén dejaba temporalmente su trabajo en televisión para recuperarse de problemas de salud y psicológicos. Volvió el 30 de noviembre de 2012, después de 4 meses fuera, a 'Sálvame Deluxe'. Los datos también fueron buenos: 20,2% de share y 2.738.000 de espectadores.

Belén Esteban, más expectación que Zapatero

Que Belén es un fenómeno televisivo queda fuera de duda cuando, en medio de esta brutal crisis que nos asola, se impone con diferencia, por ejemplo, a una entrevista con el último presidente del gobierno saliente, José Luis Rodríguez Zapatero. La entrevista tuvo lugar este domingo -dos días después que la de Belén Esteban- en el buen programa de La Sexta, 'El objetivo de Ana Pastor'.

La entrevista de Ana Pastor a Zapatero supuso el segundo mejor dato de este programa sobre actualidad política y económica. 2.126.000 de espectadores (10,7% de cuota de pantalla) siguieron las explicaciones de Zapatero en La Sexta este domingo.

En internet, la cosa cambia: la entrevista a Zapatero suscitó más comentarios en Twitter que la de Belén Esteban. Según las mediciones de Vertele.com, la reaparición de Belén Esteban cosechó 26.470 comentarios por los 40.277 que provocó la entrevista al ex líder socialista.

Pero la tele es territorio de Belén. Ni siquiera la única entrevista que ha concedido Mariano Rajoy en televisión como presidente, en septiembre de 2012, consiguió unos datos como los de Belén Esteban el viernes pasado. La entrevista de Rajoy fue más vista (3.258.000 espectadores), pero con una menor cuota de pantalla (20,6%). Esto es debido a que se emitió en lunes, el mayor día de consumo televisivo, por lo que 3,2 millones representa un porcentaje más bajo en los lunes que 3,1 en los viernes.

Belén Esteban, sus problemas, sus adicciones es una "droga" para una buena parte de la audiencia, fiel a la madrileña desde que hace años saltase al primer plano del mundo rosa. Primero Antena 3 y después Telecinco han sabido aprovechar bien esa mezcla de sensaciones y sentimientos que provoca Belén en la audiencia. Como una adictiva sustancia, Belén no deja indiferente a nadie. Ni a sus telespectadores ni a los que se niegan a serlo. Causa rechazo, odio, gracia, compasión... Es algo casi insólito en un personaje cuya vida personal es un continuo castillo de naipes que se desmorona, un personaje cuya vida fuera de los platós no puede ser ejemplo para nadie. Un personaje que cae, se recupera y vuelve a caer...

Telecinco, además, parece haber descubierto que Belén Esteban funciona ahora mejor en dosis puntuales que en el día a día. El impacto mediático de la Esteban es mucho mayor cuando acostumbra a desaparecer varios días, semanas o meses y reaparece para salir al paso de alguna polémica.

Todo este mundillo, todo lo que rodea a Belén Esteban, seguramente le está permitiendo vivir con un poder adquisitivo y con un tren de vida que ella jamás ni pudo soñar de haber quedado en el anonimato. Si es más feliz, si todo esto ha merecido la pena, es algo que ella sólo sabrá.

La audiencia, por su parte, está enganchada a su sufrimiento, sus problemas y sus fugaces recuperaciones.