Un centenar de inmigrantes intenta saltar la valla fronteriza de Melilla
Entre seis y diez subsaharianos han logrado entrar en la ciudad después de escapar de la Policía tras un forcejeo
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Alrededor de 20 inmigrantes de origen subsahariano han conseguido finalmente acceder a la ciudad autónomaEFE
La zona en la que han ocurrido los hechos ha sido la conocida como paso fronterizo de Barrio Chino, un puesto habilitado sólo para el paso de personas, no de vehículos. Unos diez conseguían saltar la valla, mientras que unos cuarenta se quedaban subidos al techo de las dependencias de dicho control fronterizo.
Tras más de una hora de espera, miembros del grupo especial de la Guardia Civil, GRS, grupo especialista en el control de masas, acercaron vehículos y escaleras para bajar a los inmigrantes subsaharianos que gritaban "libertad, libertad".
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A partir de ahí, comenzó un forcejeo entre Guardia Civil, Policía Nacional e inmigrantes, ya que al ver los subsaharianos, que los inmigrantes eran bajados y conducidos por la Guardia Civil a las dependencias del control fronterizo, posiblemente para ser devueltos a Marruecos, muchos quisieron escaparse saltando por uno de los laterales del techado, lo que ocasionó un despliegue de los GRS y la Policía Nacional, para controlar a los que estaban en el techo y los que intentaban salir del vallado saltándolo.
El grupo de, aproximadamente, una docena que consiguió saltar, fue reducido por los agentes. Pero en el forcejeo de la policía con los mismos, estos al final consiguieron librarse y salieron corriendo por el descampado circundante buscando la dirección del CETI. Fue un momento cargado de tensión, porque mientras la Guardia Civil y la Policía Nacional actuaban, en la misma zona, en el mismo sitio, había casi un centenar de curiosos, con móviles en mano para grabar o fotografiar las instantáneas, madres con sus niños pequeños, adolescentes, señoras mayores.. La imagen dantesca era la de un circo con sus espectadores. La Policía para actuar controlando al grupo que quería escaparse, se abría paso entre estos curiosos. Todo ello mezclado con periodistas locales, nacionales, y un buen número de extranjeros, como los llegados desde Corea del Sur.
Unos cinco de losinmigrantes que se encontraban subidos en el techo fueron atendidos por sanitarios de Cruz Roja, en su propia ambulancia que desplazaron hasta el lugar.
