Ocio y cultura

Las otras 10 cascadas más bellas de España

Tras el éxito de la primera entrega de Las 10 cascadas más bellas de España, y debido al extraordinario patrimonio natural e hidrográfico con que cuenta nuestro país y del que dieron fe nuestros lectores con sus comentarios. Nos hemos visto en la obligación de elaborar una segunda lista con otros 10 saltos de agua, fervenzas, chorros y nacimientos de ríos. Porque si el agua es vida, las cascadas son la alegría de vivir.

1. Fervenza do Ézaro (A Coruña)

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El pequeño pueblo pesquero de O Ézaro, en la comarca coruñesa de Fisterra, presume de contar con una de las pocas cascadas cuyas aguas se precipitan directamente al mar. El sobrante de la represa de Santa Uxía que arrastra el río Xallas va a morir al Atlántico formando un salto de 40 metros que cae sobre una poza de 16 metros de profundidad. Un espectáculo que se puede apreciar en primera línea gracias a una pasarela de madera a la que se accede desde el pueblo.

2. Chorro de Ovejuela (Cáceres)

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La otrora deprimida región de las Hurdes, en la provincia de Cáceres, se ha destapado como una de las comarcas extremeñas con mayor potencial turístico. El chorro de Ovejuela – también llamado cascada de Los Ángeles, chorrituelo de Ovejuela o chorrera de la Buitrera de Los Ángeles – es uno de los saltos de agua más hermosos de Extremadura. El acceso hasta esta gran catarata de 200 metros se hace tras recorrer un sendero que parte de la localidad cacereña de Ovejuela. No obstante, las dos mejores vistas del chorro son desde el mirador que hay en el camino, y sobre todo desde la parte más alta de la cascada, desde donde mejor se aprecia el gran atractivo de esta cascada.

3. Chorrera de Despeñalagua (Guadalajara)

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Si en el primer top ten de las cascadas más bellas de España incluimos la del Aljive, en las cercanías de Campillejo. En esta ocasión nos volvemos a desplazar hasta los pueblos negros de Guadalajara, concretamente al término municipal de Valvede de los Arroyos. Es en este privilegiado paraje guadalajareño donde el cauce del arroyo de la Chorrera, afluente del río Sorbe, forma las chorreras de Despeñalagua, una serie de caídas de agua discontinuas que se despeñan desde lo alto de una colosal pared de piedra de 80 metros de altura (120 metros). Un muro que se muestra especialmente hermoso con el deshielo primaveral. La forma más común de acceder hasta Despeñalagua es siguiendo la senda que lleva hasta el Pico Ocejón (2.049 metros), la cumbre más mítica de la Sierra de Ayllón.

4. Nacedero del río Urredera (Navarra)

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En el interior del Parque Natural Urbasa Andía, en el municipio navarro de Baquedano, tiene lugar uno de los nacimientos fluviales más espectaculares de nuestro país, el nacedero del río Urredera. Este pequeño río de apenas 19 kilómetros de longitud, es la salida natural del acuífero formado en el macizo kárstico de Urbasa. El Urederra, en euskera agua hermosa, nace en el interior de un espeso bosque, en un paraje que parece sacado de un hermoso cuento, en el que se suceden pozas de aguas cristalinas, cascadas y cortinas de agua. El primer salto se produce en un cortado a 713 metros de altitud, originando un salto de agua de más de 30 metros. La ruta de “Las Cascadas de Baquedano", que parte de la población homónima, es la mejor forma de llegar hasta este mágico lugar.

5. Orbaneja del Castillo (Burgos)

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Con una población que apenas alcanza los 50 habitantes, el pueblo burgalés de Orbaneja del Castillo está considerado como uno de los más bellos de España. La singularidad y el encanto de este pequeño enclave castellanoleonés adquiere aún más fuerza gracias el regato de agua que atraviesa la población y se mezcla con las casas de los vecinos. Una cascada que se origina en la Cueva del Agua, en mitad del pueblo y cuyas aguas van a morir al Ebro. Las localidades de alrededor como Valdelateja y Covanera son de obligada visita, así como unas curiosas formaciones rocosas que hay en la parte norte del pueblo y que se asemejan a dos camellos besándose.

6. Cascada de Goiuri (Álava)

3 - Gujuli

Los 105 metros por los que se precipita esta cascada la convierten en una de las más espectaculares del territorio nacional. Localizada en los dominios del Parque Natural de Gorbeia, en el pequeño pueblo alavense de Goiuri, resulta especialmente bella para observar en los meses primavera y otoño ya que es cuando el arroyo Oiardo lleva más agua. Para obtener la mejor panorámica, tanto de la cascada como del cañón, se recomienda pararse en un mirador al que se accede desde la carretera A-2521, antes de llegar a Goiuri desde Izarra.

7. Saut deth Pish (Lleida)

3 - Sauth deth Pish

El Val de Varrádos, en pleno pirineo ilerdense, es uno de los valles más hermosos para caminar del Val d´Arán. Los arroyos, riachuelos, barrancos, bosques de haya y abeto y las cascadas se suceden en este entorno espectacular. Entre sus caídas de agua, quizá la más bella sea el Saut deth Pish, un salto de unos 20 metros de altura cuyas aguas proceden del lago Long de Liat, más al norte. Desde Pont d´Árròs se puede coger una senda asfaltada de 12 kilómetros que va paralela al río Varradòs y que lleva hasta la cascada. Otro de los alicientes de esta área es poder observar desde sus prados la belleza de dos majestuosos picos pirenaicos, el Maladeta (3.308 m) y el Aneto (3.404 m).

8. Chorrera de los Litueros (Madrid)

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Uno de los mejores ejemplos de la fuerza que puede transmitir la naturaleza de la sierra madrileña es este torrente de agua localizado a las afueras de la localidad de Somosierra, el pueblo más septentrional de la Comunidad de Madrid. Las chorreras se generan con las aguas del deshielo de las cumbres que se unen para formar el arroyo del Caño, creando en su caída una cola de caballo constituida por tres escalones pétreos de gran altura. Estas aguas continúan su camino hasta el riachuelo de Las Pedrizas, formando el nacimiento de uno de los ríos más bellos de España: el Duratón.

9. Salto del Nervión (Burgos y Álava)

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A tres kilómetros de su nacimiento en la sierra alavesa de Gibijo, el Nervión pega un brinco de 270 metros de altura originando la cascada más elevada de la Península Ibérica. Una caída a través de unos impresionantes muros calcáreos que forman las paredes del desfiladero de Delika. Las mejores vistas del Salto del Nervión son desde el mirador del Puerto de Orduña, en la carretera que va de Orduña a Miranda de Ebro. No obstante, aquellos que prefieran el senderismo y la aventura, pueden realizar una ruta de siete kilómetros a lo largo del desfiladero.

10. Fervenzas do Toxa (Pontevedra)

2 - FERVENZA DO TOXA

Uno de los saltos de agua más populares (y el más alto) de Galicia es esta hermosa cascada situada en las entrañas de un frondoso bosque atlántico de pinares y carballeiras. Su formación se produce a escasos 500 metros de la desembocadura del río Toxa, en el Deza, dejando caer el agua por sus paredes graníticas con una gran brutalidad, lo que origina que se forme una neblina que contribuye a dar un aura más galaica al entorno. El acceso más sencillo hasta las fervenzas es desde la localidad de A Bandeira, situada en la carretera N-525 que une Ourense con Santiago, desde donde se toma el desvío para Vila de Cruces/Merza que marca el inicio del camino hasta los miradores.

Aprovecha y haz una escapada relajante en plena naturaleza, ¡hasta quizás te puedas dar un buen baño si acompaña el tiempo! Eso sí, antes habrá que ir buscando fechas ¿no?

 
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