Ferrari - Alonso: bandera a cuadros
Ni los más pesimistas podían pensar que la época de Fernando Alonso con Ferrari acabaría sin un solo título mundial
Barcelona
La escudería con más presupuesto con el mejor piloto, todo era perfecto. Schumacher podía ser destronado. Pero la Fórmula 1 es una caja de sorpresas es un deporte tan apasionante como imprevisible, capaz de triturar pilotos con una rapidez increíble. Alonso pronto se dio cuenta de que no todo era oro lo que relucía en Ferrari, que el coche no era competitivo y que tendría dificultades para ganar. Y han pasado 5 años y Alonso no ha ganado, y claro ahora tiene urgencias porque está en la recta final de su carrera y quiere sumar.
Ferrari, en mi opinión, es otra historia. También necesitan ganar pero están engullidos en un producto global con millones de seguidores en todo el mundo que compran coches y merchandising ganen o pierdan. Esa es la realidad.
Y el cuento de hadas se ha acabado. Once victorias y tres subcampeonatos es un fracaso en este teórico matrimonia perfecto. Con 33 años, el asturiano quiere volver a sentirse piloto, volver a ganar, volver a una gloria que se ha quedado ocho años atrás con su último título.
2015 será un año importante en la F1. Vettel intentará resucitar en Ferrari, Mercedes seguirá siendo la referencia, Williams querrá dar otro paso adelante y la gran incognita será el nuevo motor Honda con Alonso. Las oportunidades se van escapando, talento le sobra, pero por desgracia en estos últimos años la maquina supera al piloto en esta nueva Fórmula 1. No sirve con ser el mejor. Hay que tener un buen coche.
Hamilton ha sido el mejor, ganar once carreras no es fácil, pero tiene el instinto asesino de los campeones. El año que viene creo que no lo tendrá tan fácil. Veremos.