Cándido Méndez se retirará de UGT en 2016 para ayudar a “refundar el sindicato”
El líder sindical busca propiciar la restructuración del sindicato y dejar paso a una generación más joven
Madrid
Adiós a 20 años de liderazgo sindical. Cándido Méndez, Secretario General de UGT desde 1994, tiene previsto adelantar su marcha al año 2016, y para ello adelantará el próximo Congreso (máximo órgano de gobierno de la organización), que según el calendario ordinario debería caer en 2017. Fuentes de la organización confirman a la SER que lo hace para dejar un sindicato “en buenas condiciones” a los dirigentes que tomen el relevo. Estas fuentes confirman que lo que busca Méndez es no sólo poner orden ante los distintos escándalos que han afectado a la organización en los últimos tiempos (caso de los ERE en Andalucía, las facturas falsas en esa misma comunidad…) sino dejar encarrilado el proceso de fusión y saneamiento de federaciones y uniones territoriales que ahora conforman el sindicato.
La explicación de este paso de Méndez, coinciden distintas fuentes sindicales, hay que buscarla en el proceso de adelgazamiento de las estructuras sindicales ya acordada en el último congreso (abril de 2013) pero que está tardando en materializarse por las resistencias internas que se está encontrando la dirección. Méndez buscaría, al adelantar el Congreso Confederal de UGT, forzar al resto de organizaciones a celebrar sus procesos congresuales y así incentivar las fusiones. La idea de Méndez es dejar una UGT formada por tres grandes federaciones (Industria, Servicios Públicos y Servicios Privados), de las siete con las que cuenta ahora la UGT. Así, quedaría resuelto parte del proceso de “refundación” del sindicato, y a la nueva dirección le quedaría afrontar la delicada situación organizativa y económica de las uniones (las organizaciones territoriales) de UGT.
Las fuentes consultadas admiten que los escándalos que han afectado a UGT en los últimos años también han influido en la decisión de Méndez, pero en este caso lo que busca el hasta ahora Secretario General es también afrontar esos problemas, para que no los herede la nueva dirección. “Es un gesto de generosidad por su parte”, subrayan. El último factor que explicaría la elección de la fecha para dar el paso atrás, 2016, es que 2015 no es un buen año para una retirada porque está en marcha el grueso del proceso de las elecciones sindicales, en el que –dicen estas fuentes- no conviene someter a la organización a tensiones.
No hay un relevo claro
Las fuentes de UGT creen que todavía es pronto para hablar de potenciales relevos, pero admiten que, hoy por hoy, no hay un candidato claro para sustituir a un líder que ha dirigido 20 años el sindicato. Eso sí, señalan que dos nombres se perfilan, a priori, como posibles aspirantes: Miguel Ángel Cilleros, secretario general de la potente federación de Servicios para la Movilidad y el Consumo, y Pepe Álvarez, líder de UGT en Cataluña. En todo caso, la intención de la actual dirección es que el relevo suponga también un cambio generacional.
Cándido Méndez todavía no ha anunciado formalmente su intención de retirarse: lo hará este martes, ante los órganos de dirección del sindicato entre Congresos: el Consejo y el Comité Confederal. Allí expondrá sus razones a la cúpula sectorial y territorial de UGT, pero no será hasta el miércoles, cuando se hayan celebrado las pertinentes votaciones, cuando hable ante los medios de su decisión. No se descarta, apuntan las fuentes consultadas, que el proceso aquí dibujado sufra algún cambio si en el Consejo o en el Comité se introducen modificaciones al plan de Méndez.