Defensa planea comenzar el despliegue español en Irak la última semana de enero

Madrid

Aunque el despliegue español en Irak , inicialmente previsto para finales de 2014, ha sufrido varios retrasos por problemas administrativos derivados de las dificultades por las que atreviesa al Gobierno de Irak, el ministerio que dirige Pedro Morenés cuenta ya con desplegar los 300 efectivos españoles de manera inmediata.

Los plazos con los que trabaja el Mando de Operaciones contemplan la salida de los primeros efectivos en la última semana de enero. Un despliegue que se prolongará durante la primera quincena de febrero cuando, está previsto, viajen los últimos efectivos.

Como avanzó la SER, de los 300 militares españoles que irán a Irak, 100 de ellos pertenecientes a operaciones especiales se instalarán en Bagdad, la peligrosa capital iraquí, en el centro de instrucción que ocuparán estadounidenses, alemanes, holandeses, noruegos, franceses y australianos. El resto se destacarán en Besmaya, a unos 10 kilómetros al sureste de Bagdad, donde también junto a norteamericanos, se encargarán de formar a una brigada del Ejército iraquí en tareas de desactivación de explosivos.

El despliegue español coincidirá por tanto con la ofensiva legal antiyihadista iniciada por el Ejecutivo tras los sucesos de Francia.

Reunión del Consejo de Seguridad Nacional

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El próximo viernes está previsto que el Consejo de Seguridad Nacional que preside Mariano Rajoy se reúna en Moncloa para analizar la amenaza del terrorismo islamista en España.

La reunión se celebrará una semana después de que el Consejo de Ministros diese luz verde al anteproyecto de Ley Orgánica de Seguridad Nacional que facultará al Presidente a declarar un nuevo estado de crisis nacional . Según lo declarado a El País por Alfonso Senillosa, director del Departamento de Seguridad Nacional, el consejo estudiará el llamado Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta, en el que Interior lleva ya dos años trabajando pero del que se desconocen de momento las líneas maestras más allá de que recoge la posibilidad de la reintroducción de los controles fronterizos en el espacio Schengen en caso de agravamiento de “los desajustes derivados del derecho de libre circulación”.

Es previsible que el consejo trate también la batería de medidas en las que trabaja Interior y que pretende transformar en un proyecto de ley orgánica urgente (el formato acordado con el PSOE) contra el terrorismo islámico. Medidas que pasan por regular la figura del lobo solitario, desvinculando los tipos de terrorismo del concepto de "organización" o penalizar la difusión en Internet de contenidos terroristas o que inciten a la comisión de actos terroristas.