Uber se reinventa con comida

Barcelona

La aplicación norteamericana Uber está decidida a quedarse en España. Y busca clientes a través del transporte de comida a domicilio después de la fuerte polémica que provocó su servicio de taxi, que acabó con suspensión judicial a finales del año pasado en Barcelona. La aplicación UberEats funciona desde este pasado jueves en la capital catalana. Carles Lloret, director general de la empresa asegura que "es muy senzillo". Se trata de abrir la aplicación "indicar donde estás ubicado como se hacía con el transporte de personas y pedir cuantos platos quieres, aceptar y en 10 minutos verás como la comida llega a tu casa o donde estés y el pago se hará a través de la plataforma".

UberEats ofrece una especie de menú cerrado con diferentes platos de unos cuantos restaurantes de la zona para poder llevarlos en poco tiempo. De momento, el servicio está disponible en los barrios de Eixample, Sarrià-Sant Gervasi, Poblenou y la Barceloneta de la capital catalana. Los platos se pueden pedir durante la comida y la cena, de 12:30 a 15:30 y de 8 a 11 de la noche. Por cada transporte, UberEats cobra dos euros y medio.

Barcelona es la primera ciudad de Europa donde Uber ha puesto en marcha el servicio tras probarlo en Los Angeles. "Vemos que el número de restaurantes crece cada día, en Estados Unidos tenemos más de 60 registrados y en Barcelona llegaremos pronto al mismo número".

Después de la mala experiencia con el servicio de transporte, que recibió las iras de los taxistas, el director general de Uber, Carles Lloret, asegura que no quiere polemizar con nadie e incluso se plantea llegar a acuerdos con las administraciones en el futuro para transportar otros productos. Con la comida, asegura que han mirado bien la legislación y que cumplen todos los requisitos. "Los restaurantes tienen la licencia de comida a domicilio y los transportistas son autónomos".