Ocio y cultura

Prepara un buen hummus como si estuvieras en Jordania

En cualquier mesa de países como Jordania, Israel, Turquía, Líbano, y en general, en todo Oriente Medio, nunca falta un buen mezze. Consiste en un surtido de distintos platos en forma de entremés o aperitivo que sirven de preludio al plato principal. En muchas ocasiones la cantidad de comida en los mezzes es tal que uno llega saciado al resto del menú. Es una tradición muy típica del Este del Mediterráneo y forma parte del ritual con el que agasajar a los invitados, tan propio de la hospitalidad legendaria de estos países. Dentro del mezze hay un plato que no falta prácticamente nunca, el hummus, una especie de puré de garbanzos que se unta con pan de pita y que tiene un sabor delicioso.

El hummus es un clásico en el Mediterráneo oriental, muy rico y, sobre todo, realmente sencillo de preparar. Os mostramos cómo hacerlo para que sepa igual que en el mejor restaurante de Jordania. Y sin salir de casa…

Cuando los viajeros prueban el hummus se quedan siempre con ganas de más. De lo limpios que acaban los platos no hace falta si quiera lavarlos. La considerada como una de las comidas más típicas y apreciadas del Medio Oriente forma parte del menú diario de jordanos, turcos, sirios, egipcios, israelíes o libaneses.

Se puede realizar un viaje a estos países a través de los sentidos y sin salir de casa. Cocinar un buen hummus es muy fácil. No hace falta ser Arguiñano para preparar un plato sabrosísimo con el que sorprender a las visitas (y chuparte los dedos).

Necesitamos:

-          1 bote de garbanzos cocidos (aproximadamente 400 g sirven para aproximadamente 8 personas).

-          Tahina, que es una especie de pasta hecha con sésamo. Se vende en herbolarios o en tiendas de productos típicos árabes. Se llega a encontrar incluso en algunas grandes superficies. (de 2 a 3 cucharadas)

-          Aceite de Oliva. Por supuesto, Virgen Extra, que para eso tenemos los mejores aceites del mundo.

-          Ajo

-          Limón.

-          Comino

-          Cayena

-          Sal

Todos estos ingredientes van para la batidora. El bote de garbanzos entero salvo unos pocos que nos guardemos para decorar el plato al final, una cucharada grande de tahina, un par de cucharadas de aceite, el jugo de medio limón, un diente de ajo, una pizca de comino y otra de cayena para darle un toque ligeramente picante, y rematamos con un poquito de sal.

Una vez comenzamos a batir hay que ir echando un poco de agua si vemos que se está espesando demasiado. Tiene que quedar con una textura ni demasiado líquida ni demasiado dura. Con una batidora de mano hará falta menos agua y con las americanas medio vaso más. Pero todo dependerá de cómo lo vayamos viendo. Es cuestión de sentido común y de cómo nos guste el hummus.

Vertemos el contenido en el plato y esparcimos pimentón dulce. Para decorarlo queda muy bien hacer un agujero en el medio rellenándolo con unos pocos garbanzos que nos hayan sobrado y añadir un chorrito de aceite como toque final.

Y conviene recordar que para untar no nos vale una barra de pan normal y corriente. Hace falta pan de pita, que se vende en muchos supermercados, para poder saborear mucho mejor esta crema espesa de garbanzos.

Será como estar una noche en un café de Ammán o esperando que caiga la tarde sobre las colinas del desierto de Wadi Rum. La gastronomía… ese otro viaje.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00