Alemania no forzará la salida de Dijsselbloem para que De Guindos presida el Eurogrupo
El ministro español de Economía deberá trabajar en solitario para obtener más apoyos que el holandés Dijsselbloem porque Berlín constata que hay dos candidatos y que los dos son buenos, según han confirmado a la Cadena SER fuentes cercanas al equipo de Merkel
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi (c), conversa con el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem (dcha), y el ministro español de Economía, Luis de Guindos / JULIEN WARNAND (EFE)
Bruselas
La elección del presidente del Eurogrupo se hace por mayoría, no necesita la unanimidad de los gobiernos pero el problema es que son muchos los que no ven la necesidad de cambiar de presidente en plena crisis griega y menos cuando el holandés está haciendo una gestión que consideran más que efectiva.
El problema español, han explicado a la Cadena SER fuentes comunitarias, es que cantan victoria antes de ganar la batalla. Y esto en la práctica quiere decir que el apoyo ofrecido por la canciller Merkel a la candidatura de De Guindos el pasado verano fue mal interpretado por la delegación española ya que aunque España, pueda contar con el voto alemán, si es candidato, la "disponibilidad" expresada por Merkel no implica que el español deba garantizarse los votos suficientes para poder obtener este puesto y la candidatura del ministro holandés a su reelección, complica los planes españoles.
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Para De Guindos, su mejor baza es la infrarrepresentación española en las Instituciones Europeas, especialmente tras perder el año 2012, el puesto que se había ejercido de forma permanente en la dirección del BCE. Pero este argumento no es tampoco en sí mismo ninguna garantía para la Presidencia del Eurogrupo que el ministro español deberá pelear con mucha "simpatía" aunque su apuesta parece complicada a quienes ven como Dijsselbloem gestiona con "solidez" la nueva negociación con Grecia.
Alemania no se pronunciará contra la opción de Dijsselbloem para que el español De Guindos pueda ocupar el puesto. No empujará para substituir al ministro holandés porque el gobierno alemán considera que es un hecho que hay ya dos candidatos y que los dos son buenos según han confirmado a la cadena ser fuentes diplomáticas europeas.
En la práctica, fuentes comunitarias consideran que España ha cantado victoria antes de ganar la batalla que no ha estado jugada. Quizás mal interpretando el apoyo de Merkel, porque una cosa, dicen aquí en Bruselas es que la canciller considere que el ministro De Guindos es un buen candidato y, el otro, que Berlín pueda garantizarle un puesto cuya designación es competencia clara del Eurogrupo.
Posición con la que se justifica que el ministro holandés haya movido ficha, dando por hecho que el puesto, este próximo julio será para el ministro que obtenga más apoyos entre los miembros del Eurogrupo.
