El spoiler como nueva forma de conflicto social
Con las redes sociales, la amenaza de spoiler se multiplica y los seriéfilos se indignan
Madrid
Aún no forma parte del diccionario de la Real Academia Española, y eso que los últimos fichajes que han entrado a formar parte de la Biblia lingüística del castellano han dejado el listón muy abajo (de batucada a establishment pasando por cagaprisas, amigovio y chupi). Y aunque Fundeu recomienda el uso de "despiece", la palabra spoiler ya forma parte de la vida y los miedos de cualquier aficionado a las series y al cine.
También está integrada en el día a día de aquellos a quienes se la trae al pairo esto de los spoilers, pero no dejan de asistir -sufridamente, claro- al cansino debate sobre este fenómeno que se produce cada poco tiempo en redes sociales a cuenta de algún detalle que se desvela sobre el argumento de tal o cual serie o película.
Más que debate, lucha, trifulca o guerra de sofá y esnobismo. Un spoiler provoca hoy en día una queja en redes sociales tan sonora o más que una política de recortes educacionales o el último escándalo político. ¿Exageración? Muestra de esto ha sido el último gran spoiler que ha llegado relacionado con la serie 'Anatomía de Grey'. Trending topic mundial y todos los medios haciéndose eco del mismo en sus ediciones digitales. Este viernes solo se ha hablado de este spoiler y del sorteo de Champions League, al menos en redes sociales.
Y es que el spoiler es la nueva forma de confrontación social en el territorio 2.0. Uno comenta un aspecto inocuo de un pasaje de una serie y, automáticamente, comienzan los reproches de aquellos que no pueden vivir con el hecho de enterarse de que Menganito muere en el siguiente capítulo o que Fulanito lleva calzoncillos verdes en tal escena en la que se rasca la cabeza. Como en todo, en los spoilers también hay clases y tipos; máxime si se tiene en cuenta que se trata de un territorio ampliamente abonado al postureo -otra palabra desconocida para la RAE-.
Es evidente que recibir un tipo de información anticipada puede restar interés a un episodio o puede modificar la manera en la que se vive el visionado de ese capítulo; pero en no pocas ocasiones el spoiler es tan ridículo que casi se agradece que la información prematura. Da igual, aún así habrá quien se escandalice, quien se enfade y quien lo recrimine.
En Occidente, el spoiler y el conflicto por su causa se ha institucionalizado como un grave y frívolo problema del siglo XXI merced a internet y las redes sociales. Hace unos años, el único espacio conocido para estos impertinentes despieces eran las críticas de películas que se publicaban con anterioridad al estreno de la misma. Pequeñas concesiones siempre perdonadas por el lector si el estilo literario del crítico era digno de disfrute y deleite cultural.
Hoy, hay quien atiza una elegante y conseguida crítica de cine o televisión porque le ha desvelado el color de los calzoncillos de Fulanito (verdes); hoy, hay quien demanda sinopsis comerciales y engañosas en lugar de críticas profesionales para que no se cometa ese imperdonable delito de spoilear -sí también se puede conjugar- .
No obstante, evitando la lectura de artículos de opinión sobre películas y series no se consigue asegurarse huir del spoiler. Las redes sociales son un campo minado: tuits, vines, memes, links… Al día siguiente del final de 'Breaking bad' la psicosis colectiva se apoderó de todos los fans que aún no habían visto el capítulo: sus vidas se volvieron analógicas por unas horas. Terrible suceso.
Por si esto no fuera poco, para no ser atropellado por ese spoiler que amargue tu vida, también hay que mantener sumo cuidado con todo lo que cuentan o dicen actores, productores, directores… Un comentario en una entrevista sobre lo que le ocurrirá a su personaje, un foto que cuelgan en Instagram donde se un guion en el que se puede leer que tal personaje se divorcia de tal otro… El spoiler es como el confeti, cuando crees que ya te lo has quitado todo, aparece en el bolsillo.
¿Cuántos inocentes comentarios sobre el último capítulo de 'Juego de Tronos' tomando un café con los compañeros de trabajo han provocado el vacío social a ese ingenuo que se le ocurrió hablar de la lucha entre Oberyn y la Montaña? ¿A cuántos amigos habrá separado un spoiler? ¿Cuántas parejas habrán roto?
Quizá, la mejor solución para la paz 2.0 y para el fin de los spoilers sea consumir únicamente series españolas. Con los avances que preparan las cadenas, en los que se destripa por completo el argumento del capítulo de la semana siguiente, es imposible que nadie discuta con nadie por esta razón.