Rajoy pide a De Guindos que sea candidato a presidir el Eurogrupo

Riga

Se lo pide Rajoy y él obedece. Esta es la imagen que el ministro español de Economía ha dejado hoy en la rueda de prensa que ha celebrado en Riga. "El presidente del Gobierno, yo por supuesto siempre les dije que haré lo que me pida el presidente, ha dicho que vamos a presentar la candidatura de España y esa candidatura de España está ahí", ha explicado.

Su entorno da por hecho que el apoyo de Merkel empujará al ministro holandés y actual presidente del Eurogrupo a retirar su candidatura a la reelección. Es una vieja opción porque la retirada "voluntaria" de Dijsselbloem fue también la carta que jugó España hace un año cuando creía que en el reparto de puestos en las Instituciones, realizado después de las elecciones europeas, podría obtener ya la Presidencia del Eurogrupo.

Pero la insistencia española en dar por hecho que el ministro holandés dejaba el puesto acabó tornándose en su contra y ofreciendo a Jérôme Dijsselbloem la solidaridad de los ministros de muchos gobiernos más pequeños que temen el dictado de los países grandes. Hoy Dijsselbloem parece que mantiene estos apoyos, también entre algunos gobiernos conservadores de países pequeños y entre gobiernos grandes y socialistas que como Francia creen que negarle el voto a Dijsselbloem sería interpretado como un castigo a su gestión. "Los dos son amigos y muy útiles", ha dicho en Riga el ministro francés de Finanzas Michel Sapin.

Para romper la relación de fuerzas favorable al ministro holandés, dentro del Eurogrupo, De Guindos centra sus argumentos en que "España necesita un reconocimiento" a los muchos esfuerzos realizados en la gestión de la crisis, convirtiendo, a pocos meses de las elecciones, su nombramiento en una especie de premio por los recortes. Un discurso con el que el ministro espera que quienes dicen que España ha mejorado mucho demuestren su satisfacción permitiendo a un ministro Español presidirles en temas económicos.

Pero el reconocimiento a la "buena gestión de la crisis" que empieza a oír se en los discursos institucionales no es garantía de desbancar a Dijsselbloem porque, como ha explicado en Riga el ministro francés de finanzas: "Luis tiene un papel muy importante entre grandes países del Eurogrupo y Jérôme juega hoy un papel muy importante para intentar encontrar una solución en el difícil camino de los acuerdos con Grecia". Y es que la gestión de la crisis entre la zona euro y el gobierno de Atenas es en estos momentos el mejor aval para el ministro holandés de Economía, Jérôme Dijsselbloem, que en estos dos últimos meses de negociaciones ha logrado imponer una imagen de negociador duro pero respetuoso, capaz de suspender reuniones sin perder la paciencia. Un aire nuevo con el que espera reconducir la imagen de negociador joven e inexperto con la que se estrenó en la crisis de Chipre.