Los obispos animan a marcar la casilla de la iglesia con su labor asistencial

Madrid

Detrás de cada X hay una historia. Ese es el lema de la campaña con la que la conferencia episcopal pretende animar este año a los contribuyentes a que marquen la casilla de la iglesia en su declaración de la renta. Los anuncios,  que ya pueden verse en televisión y escucharse en radio, reflejan la tarea cotidiana de ayuda que muchos religiosos prestan y su labor pastoral más cercana.

A pesar de estar enfocada en la asistencia social como reclamo a los contribuyentes la mayoría del dinero que la conferencia episcopal recibe por el IRPF se destina a otras cuestiones. En la memoria de actividades del año 2012, la última publicada, se ve como el grueso va destinado al capítulo "envío a las diócesis/ gastos generales". Le sigue en gastos la seguridad social de clero y la ayuda a rehabilitación y construcción de templos/compensación por IVA. El responsable de la oficina para el sostenimiento económico de la iglesia, Miguel Ángel Jiménez Salinas, ha justificado el sentido de la campaña: "Cuando llega un sacerdote, en un pueblo pequeño, a una persona mayor y la acompaña, la escucha, está en la plaza...Eso se puede denominar como labor religiosa, labor social. Podemos ponerlo en el marco en el que queramos.De hecho yo creo que es una gran contribución a la sociedad que no es precisamente lo que se ve".