Movilización de las bases y muchos 'selfies' con Pedro Sánchez

Málaga

Pedro Sánchez llega al ecuador de la campaña tras pasar por Madrid a Asturias, Castilla y León, País Vasco y Andalucía pidiendo el voto útil para desalojar al Partido Popular, apelando incluso a quienes un día le dieron su apoyo y están ahora decepcionados. 

Ése es el punto al que siempre vuelve su discurso de estos ocho días de campaña en los que ha empezado a dar réplica a los partidos emergentes, sobre todo, a cuenta del bloqueo institucional en Andalucía. Los socialistas son conscientes de que para debilitar el poder territorial del PP tendrán que emplearse en su política de alianzas tras el 24 de mayo y, pese a repetir a diario que aspiran a ser primera fuerza política, ya han adelantado sus líneas rojas: con todos menos con el PP y Bildu.

En Ferraz dicen estar satisfechos con el nivel de movilización del partido en la campaña frente a un PP que consideran que vive un proceso similar al del PSOE de 2011, cuando el gobierno de Zapatero era un lastre para los candidatos municipales y autonómicos. Entienden que está calando la imagen de un PSOE renovado (estrenan el 80 por ciento de los carteles electorales) y que estos días se ha demostrado, según recalcan, que Pedro Sánchez es el "principal activo del partido".

Quizá sea por eso que el secretario general cada vez aprieta cada vez más su agenda. No anula ningún acto y añade paradas para tomar cafés y pasear con los candidatos por las ciudades que le pillan en ruta. Pasa mucho tiempo en la calle y hay colas para hacerse fotos con él. "Yo ya no tengo edad para esto", comentaba una señora móvil en mano antes de acercarse para buscar un selfie con Sánchez, que había recalado en una heladería a tomar una horchata. Al final, es él quien termina haciendo la foto, que suele tener los brazos más largos que el resto. El secretario general, no obstante, tuvo que lidiar ese día con dos protestas contra la Junta. "Donde de gobierna no se contenta a todos", justificaba un dirigente socialista cuando se le preguntaba por el hecho de que el paseo triunfal de Sánchez sólo haya tenido obstáculos en Andalucía.

Se le presta especial atención a estos episodios porque hay quien dice en el PSOE que ésta es una campaña muy personalista diseñada para amarrar la candidatura de Sánchez a la Moncloa. Durante la jornada del jueves, por ejemplo, el líder socialista permitió que le acompañase empotrado en todos los actos un famoso tituitero, @diostuitero. Sánchez interactúa con él en las redes bajo el hashtag #HabemusPedro.

Frente a quienes señalan que hay más atención al líder que al proyecto, Ferraz defiende, por contra, que el secretario general está al servicio de los candidatos. "Pedro suma", repiten varias voces.

Para la segunda semana de campaña electoral antes del 24 de mayo, quedan dos platos fuertes: el mitin del sábado en la plaza de toros de Valencia, que será el acto más concurrido de la campaña, y la cita, por confirmar aún, con Susana Díaz en Andalucía. No hay fecha, aunque Sánchez da por hecho que coincidirán en la tribuna. Hasta ahora es la única secretaria general que no le ha hecho los honores al visitar su territorio.