Un combatiente yihadista extranjero gana en Siria 1.400 dólares al mes

Madrid

El sueldo anual de un combatiente yihadista que sale de España con destino a Siria e Irak asciende a 16.800 dólares al año (14.705 euros). Un combatiente residente en los países en conflicto recibe 400 dólares al mes (350, 275 euros) pero el salario se incrementa entre 700 – 1.000 dólares más si vienen de lugares como Europa o Marruecos.

Si el combatiente proviene de Europa, Marruecos o EEUU su sueldo medio mensual puede llegar a los 1.400 dólares (1.226 euros). Si están casados reciben un bono de pareja de 100 dólares más y si tienen niños, 50 dólares por cada niño. Los combatientes autóctonos tienen un sueldo inferior que a veces no llega a los 400 dólares.

Son datos que recoge el último informe policial de los Servicios de Información del Estado sobre las fuentes de financiación y gastos que tiene el Estado Islámico al que ha tenido acceso la Cadena SER. Entre las fuentes de ingresos regulares en efectivo que tienen para pagar a los combatientes yihadistas está la venta de mujeres. “Por cada esclava sexual vendida obtienen alrededor de 1.000 dólares. Las venden a los mismos combatientes que compran con el sueldo que reciben de la organización terrorista”. La mayoría de las mujeres vendidas son yazidies capturadas en Irak que han sido obligadas a convertirse al Islam.

Otra fuente de ingresos es el dinero que reciben de los chantajes que hacen a comerciantes locales, los gravámenes a los conductores de camiones que utilizan sus carreteras y los impuestos que han instalado de forma obligatoria entre la población de los territorios que han ocupado. Según este informe DAESH puede llegar a recaudar, “sólo en un mes, ocho millones de dólares procedentes de impuestos que imponen a las pequeñas y grandes empresas”.

El mayor flujo de dinero, la base de su infraestructura y supervivencia, la obtienen de la venta de petróleo. Según este informe tiene una capacidad de producción de unos 350.000 barriles por día aunque solo producen entre 50.000 y 60.000 barriles diariamente que luego venden en el mercado negro a un precio de entre 25 y 60 dólares por barril (40 dólares como media), una tarifa inferior a las que existen en los mercados internacionales que tienen de promedio una cifra alrededor de los 80 dólares por barril. Según este informe policial “hay indicios de que el petróleo se negocia y llega al régimen sirio de Bashar Al- Assad” y a “determinados estados miembros de la Unión Europea (UE) que compran el crudo procedente de DAESH a bajo precio”. Los recientes ataques militares por parte de la coalición internacional sobre las refinerías han reducido los ingresos de la venta del petróleo pero el Estado Islámico ha llegado a obtener un millón de dólares al día. Los investigadores estiman que DAESH (ISIS) controla siete campos petroleros y dos refinerías en el norte de Irak y seis campos de los diez que tiene Siria, en particular en la región de Deir ez-Zor (este) y Hasakeh (noreste).

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Al tráfico de antigüedades también le han sacado partido. Es complicado cuantificar el dinero exacto que han embolsado pero hay constancia policial que consiguieron al menos 36 millones de dólares en una sola provincia de Siria. “Operan con ciertas mafias internacionales que se ocupan de los restos y de todo lo relacionado con el patrimonio y que informan a DAESH de lo que se puede vender”.

Hay financiación también de otros países de la región como Arabia Saudí y financiación privada de Qatar “bajo el disfraz de organizaciones benéficas islámicas y contribuciones de donantes dentro del marco asistencial”. De todas formas ahora mismo DAESH depende menos de estas donaciones privadas que pueden suponer aproximadamente el 2% de sus recursos.