El Camp Nou se rinde a Xavi Hernández

El tremendo mosaico que rezaba #6raciesXavi al inicio del encuentro entre el Fútbol Club Barcelona y el Deportivo de la Coruña ya hacía entrever que iba a ser una jornada muy emocionante para Xavi Hernández, el gran capitán culé que presumiblemente disputó en la tarde de hoy su último partido como azulgrana.

El mediocentro de Tarrasa, que salió del campo en el minuto 85, se despidió del terreno de juego visiblemente emocionado y entregando el brazalete de capitán a su gran amigo Andrés Iniesta, compañero de fatigas durante cientos de partidos en la medular blaugrana.

Después del encuentro, que finalizó con 1-1 en el marcador, se le entregó a la plantilla del Barcelona el trofeo de Liga conquistado la semana pasada en el Vicente Calderón. Fue el momento de coger el micrófono y tras Luis Enrique e Iniesta, le tocó el turno al gran protagonista de la tarde: Xavi, con lágrimas en los ojos, se dirigió la grada del Camp Nou para hablar a la que es su afición por última vez como jugador culé.

"Muchísimas gracias por todo. Estoy muy agradecido por haber jugado dieciséis temporadas en el Barcelona. Somos el mejor club del mundo, digan lo que digan", sentenció el centrocampista de Tarrasa, siempre fiel a una idea futbolística y a un estilo de juego que llevó a cabo tanto en su club como en la Selección Española hasta las últimas consecuencias.

Xavi también agradeció el apoyo incondicional de su mujer, familia y amigos, que siempre han estado acompañándole, en los buenos momentos pero sobre todo en los malos, en aquellos más difíciles. "Nos quedan la Copa y la Champions". recordó el gran capitán culé antes de dar en solitaria la vuelta de honor a un Camp Nou que durante tres lustros ha sido totalmente suyo.