Hipertermia, el calor como aliado para acabar con el cáncer
Es una nueva técnica que permite calentar el tumor a más de 43 grados antes de la radioterapia. Según las investigaciones internacionales, "se duplica la eficacia de la radioterapia"
Madrid
El calor puede convertirse en una nueva arma terapéutica contra el cáncer. Al menos, esa es la esperanza que están empezando a pulir los oncólogos de todo el mundo. En EEUU y en Europa “se han hecho 18 estudios aleatorios que han demostrado que se mejoran los resultados en los pacientes en los que se ha incluido la Hipertermia en los tratamientos de radioterapia y quimioterapia”, según la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR).
Esta técnica consiste en aplicar calor sobre el tumor “a temperaturas por encima de 43 grados”, según el doctor Pedro Lara, vicepresidente de la SEOR, “lo calentamos lo máximo posible, así conseguimos que las células se alteren con el calor y que su sistema de defensa no funcione”.
De esa forma logran que las células tumorales sean incapaces de regenerarse tras la radiación, mejorando así las opciones de erradicar el tumor.
En las publicaciones internacionales, “con evidencia uno, es decir, la máxima evidencia científica, se ha demostrado que cada dosis de radiación es el doble de efectiva si se combina con hipertermia”, cuenta el doctor Lara.
Aunque la hipertermia es uno de los avances más interesantes en esta tenaz lucha contra el cáncer, esta nueva técnica aún no ha sido incluida en el Sistema Nacional de Salud, solo alguna clínica privada está ofreciendo esta nueva terapia, según la SEOR.
Los equipos oncológicos, cada vez más viejos
Por enésima vez, los oncólogos expertos en radioterapia han denunciado la antigüedad de los equipos con los que trabajan, muchos están obsoletos porque se reduce su eficacia en el tratamiento de los pacientes.
Se reduce su eficacia, y su precisión. De los más de 214 equipos de oncología radioterápica que hay en España, un tercio tienen más de 10 años, es decir, “son demasiado viejos”, advierte la Sociedad Española de Oncología Radioterápica.
Con un éxito nulo, estos profesionales llevan años tratando de que el Ministerio de Sanidad regule esta situación, “porque España no tiene limitada la edad de estos equipos”, como sí ocurre por ejemplo, “en Francia”.
Lo ideal, según la SEOR, sería renovarlos “a los 12 o 15 años”.
¿Tendrá España una unidad de protones?
De momento no, pero en el futuro, "ya se verá", dicen desde la SEOR, donde atisban un "rayo de esperanza porque está trabajando intensamente para que en España haya una o varias unidades de protones", según el doctor Leoncio Arribas, que incluso anticipa que "en los próximos meses habrá noticias".
El precio de una unidad de protones es muy alto, esa es una de las grandes barreras, “ronda los 25 millones de euros, y de media, puede tratar a 2.000 ó 3.000 pacientes por año”, según el presidente de la SEOR, José López Torrecilla. Pero lo tienen claro, “España necesita al menos una unidad de protones”.
Se trata de una técnica experimental que “ya se desarrolla en el resto de países europeos de nuestro entorno, y España no puede quedarse atrás”.
Actualmente, la radioterapia se da a través de fotones, y los haces de rayos X alcanzan tanto los tejidos sanos como los cancerosos, destruyendo todo lo que se cruce en su camino.
La diferencia respecto a la radioterapia por protones es que se consigue que la radiación se aplique directamente al tumor, es decir, eliminando las células cancerosas sin afectar el tejido sano que hay alrededor.
En un futuro, “España necesitará cinco unidades de protones, en algún momento habrá que empezar”, según cree el doctor López Torrecilla.
Será uno de los temas que traten en el XVIII Congreso de la SEOR, que se celebra del 4 al 6 de junio en Valencia, donde participarán 600 expertos, tanto nacionales como internacionales.
Javier Bañuelos
Redactor Jefe en la Cadena SER responsable de la información sobre Interior y Defensa. Antes trabajé...